Calentando los músculos y utilizando el equipo deportivo correcto, puedes limitar el dolor y otras lesiones causadas por el ejercicio.
A pesar de los beneficios del ejercicio físico, estas actividades pueden provocar lesiones si no se enfocan correctamente. Cualquier ejercicio que podamos incorporar a nuestro día, como ir al gimnasio, montar en bicicleta, caminar, nadar o correr, puede aumentar nuestra salud y fuerza física. Sin embargo, comenzar nuevas actividades puede provocar lesiones o distensiones musculares.
Según la Asociación para el Autocuidado de la Salud, hay una serie de medidas de precaución que se pueden tomar para evitar lesiones. Lo más importante es calentar antes de empezar el ejercicio principal. Esto puede implicar caminar, trotar o realizar estiramientos activos. Cualquiera de estas actividades servirá para aumentar la movilidad de las articulaciones y los músculos. El calentamiento eleva la temperatura corporal y aumenta el flujo sanguíneo a los músculos a través del sistema cardiovascular. Durante el calentamiento, concéntrate primero en los grandes grupos musculares y luego trabaja hacia los músculos específicos que se utilizarán durante el ejercicio.
Del mismo modo, una sesión de enfriamiento después del ejercicio también ayudará a reducir los calambres y el dolor muscular. Esto permite que el ritmo cardíaco y la presión arterial vuelvan a disminuir. La sesión de enfriamiento es similar a la de calentamiento, ya que puede incluir caminar, trotar o estirar.
Otro factor importante para evitar lesiones es encontrar el calzado adecuado que se ajuste a la actividad. Esto ayudará a evitar los resbalones causados por un calzado inadecuado. Además, el apoyo correcto en un zapato puede disminuir la presión sobre las articulaciones y los músculos, lo que sirve para reducir aún más el dolor y las lesiones. No es necesario gastar una elevada cantidad de dinero en zapatos, sino encontrar unos que se ajusten específicamente a tus pies y a tu actividad. Hay una gran variedad de tiendas de deportes que te ayudarán a medir tu pie y tu arco para encontrar el zapato correcto para ti.
Por último, se pueden utilizar suplementos para aumentar la salud y la fuerza de las articulaciones, los cartílagos y los huesos. Algunos ejemplos son los suplementos de colágeno, magnesio, calcio o vitamina B. Asegúrate de consultar primero con un médico o farmacéutico para asegurarte de que el suplemento es adecuado para ti.
En el caso de que haya una lesión, es crucial tomarse un tiempo para descansar y curarse para no dañar más el hueso o los músculos. Lo ideal es limitar estas lesiones, prestando especial atención a los calentamientos, los enfriamientos y el calzado. Aunque estas medidas de precaución requieren un poco más de tiempo y atención, en última instancia, mejorarán tu rendimiento deportivo al apoyar correctamente tus huesos y músculos y prevenir el exceso de dolor.
FUNIBER patrocina una variedad de cursos especializados en la salud que rodea a las actividades físicas. Algunos de los programas son la Maestría en Actividad Física y Salud y la Maestría en Optimización en Rendimiento Deportivo.
Fuentes: Tres claves para prevenir lesiones en el deporte
Aerobic exercise: How to warm up and cool down
Foto: Todos los derechos reservados.