La precaria situación de los adultos mayores en el Líbano se ha visto agravada ante la explosión en la ciudad de Beirut.
Beirut, la capital del Líbano, sufrió una explosión el 4 de agosto en la zona portuaria que resultó en el fallecimiento de 177 personas.
Como consecuencia del desastre, la asociación HelpAge International denuncia la precaria situación de muchos adultos mayores de la zona, que ya vivían previamente en extrema pobreza.
El pasado 13 de agosto, el director de Eurasia y Oriente Medio de HelpAge International, Chris McIvor señaló que, “después de meses dando apoyo a las personas mayores para que se protegieran de la covid-19, la explosión ha dejado a miles de ellas completamente expuestas, sin refugio, sin comida y sin la posibilidad de practicar el distanciamiento físico”.
La dificultad de atención médica y las viviendas destruidas con la explosión son factores que preocupan a las autoridades sanitarias que luchan por frenar la propagación de la pandemia de coronavirus y que, en esta ciudad, “podría provocar un aumento de casos”.
La organización señala que la destrucción de los hospitales está impidiendo que los adultos mayores accedan a atención sanitaria. A pesar de que la situación afecta a todos por igual, HelpAge incide en que los adultos mayores “pagan un precio mayor”.
“Sabemos por experiencia que, a menudo, se ignora a las mujeres y los hombres mayores en las respuestas de emergencia y no se debe permitir que esto suceda en esta crisis. Los actores humanitarios deben tener en cuenta las necesidades inmediatas a corto plazo de alimentos y refugio, pero también el riesgo que representa la covid-19. Deben asegurarse de que la respuesta a la crisis apoye la prevención, la capacidad de tratamiento y la concienciación de la comunidad” concluyó McIvor.
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Fuente: Las personas mayores se enfrentan a grandes riesgos en el Líbano tras la explosión de Beirut.
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