Entre estas especies, mosquitos, cangrejos y mejillones, que comienzan a habitar la Antártida y amenazan el ecosistema local.
Según un estudio publicado en la revista Journal of Biogeography, el archipiélago de las Islas Orcadas del Sur, en la región de la Antártida, cerca de la ciudad argentina de Ushuaia, ha estado recibiendo mosquitos de la especie Eretmoptera murphyi durante 60 años.
Estos insectos se han multiplicado y amenazado el ecosistema local, que tiene solo dos insectos nativos que intentan sobrevivir a otros invasores.
Estos invasores alteran la cadena alimentaria a medida que se alimentan de materia orgánica. «Además, es una población muy densa», explica Luis R. Pertierra, uno de los autores del estudio para el diario El País.
Estas especies invasoras han migrado para adaptarse al cambio climático, según Pertierra, quien dice que con la actividad humana y el aumento de la temperatura, algunas especies buscan áreas que puedan desarrollarse. «Tenemos que frenar estos cambios que están ocurriendo a un ritmo vertiginoso», dice.
Pero los insectos no son la única amenaza para la fauna y flora de la región. Según un estudio realizado por el British Antarctic Survey, en el Reino Unido, hay 13 especies que podrían invadir la península antártica en los próximos diez años. El responsable del estudio, Kevin Hughes, cree que si las medidas de control y prevención no se toman a tiempo, el peligro no dejará de aumentar. Es mejor prevenir la invasión que erradicarla, advierte el científico británico.
Hughes señala que faltan estudios sobre la interacción entre especies nativas y no nativas. “Pero podríamos decir que están en guerra. Los que llegan pueden adaptarse con extrema facilidad y los que no siempre saben cómo reaccionar”, comenta.
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Fuente: El cambio climático y la actividad humana facilitan la llegada de especies invasoras a la Antártida
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