Este concepto está vinculado con la toma de decisiones de una empresa. La habilidad de transformar unos datos en información y, a su vez, en conocimiento, pueden marcar la diferencia a la hora de decidir aspectos de relevancia en la compañía.
La toma de decisiones es un factor común a todas las empresas. Optimizar este proceso es el objetivo de la gran mayoría de empresarios.
El portal web Cepymenews define Business Intelligence o Inteligencia de Negocios como “todo ese grupo de procesos, herramientas y tecnologías enfocados a la obtención rápida y sencilla de datos del sistema de gestión empresarial. Estos datos pueden ser analizados e interpretados con el objetivo de dilucidar la toma de decisiones y utilizarlos como fuente de conocimiento para los responsables de una empresa”.
Hay diferentes niveles de operación, según afecte a la toma de decisiones del día a día (nivel operativo), en un futuro próximo (nivel táctico), o a largo plazo (nivel estratégico). La mejora del servicio al cliente, una mayor eficacia y la velocidad de respuesta son algunas de las ventajas de apostar por esta técnica.
Las herramientas necesarias para llevar a cabo esta estrategia se agrupan en cinco áreas diferenciadas:
- Producción: herramientas que aportarán datos estadísticos sobre líneas de producción, rotación de inventarios, etc.
- Logística: todas las herramientas relacionadas con el seguimiento de envíos o similares.
- Finanzas: se agrupan aquí los informes de gastos y costes, previsión de impuestos, etc.
- Ventas: datos de relevancia sobre el cliente y el producto.
- Mercadotecnia: herramientas para la segmentación del mercado.
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Fuentes: Qué es el Business Intelligence y cuáles son sus ventajas para tu empresa
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