Los proyectos de centros intergeneracionales van tomando fuerza y aportan beneficios para la salud de las personas mayores adultas y la educación de los niños.
Algo que tradicionalmente se ha dado en el ámbito familiar, el contacto entre distintas generaciones compartiendo espacios comunes, está tomando cada vez más fuerza en los denominados centros intergeneracionales.
El trato entre adultos mayores y los más pequeños ha sido siempre favorecedor para la transmisión de conocimientos y experiencias, así como la comprensión y respeto por las distintas fases generacionales. No obstante, los cambios en la sociedad y en las estructuras familiares han hecho que este intercambio actualmente sea casi inexistente.
De la voluntad de recuperar el contacto entre ambos colectivos y promover los beneficios de esta interacción, los proyectos de intercambio intergeneracional se han ido extendiendo cada vez más.
Los centros intergeneracionales son espacios de encuentro entre personas adultas mayores y niños, construidos con la intención de compartir programas, servicios y actividades. Estos espacios sirven para eliminar las barreras que separan estas dos generaciones promoviendo la interacción e impulsando el bienestar para ambas.
Los beneficios que estos centros aportan son numerosos. Algunos de ellos son la construcción de relaciones positivas y apoyo muto que mejoran el clima de los espacios en los que conviven. Gracias a estas iniciativas ambos colectivos experimentan beneficios en el plano emocional.
Los adultos mayores recuperan vitalidad y se reducen sentimientos de soledad y aislamiento. Asimismo, los niños construyen ideas positivas y menos estereotipadas acerca del envejecimiento. Los más pequeños aprenden a considerar a las personas mayores adultas como fuente de sabiduría y desarrollan habilidades como la empatía.
Guarderías con espacios para centros de día para personas adultas mayores o campamentos de verano en residencias, son solo algunos ejemplos de lugares habilitados para este intercambio generacional.
El objetivo de estas comunidades intergeneracionales es focalizar la atención en las necesidades de todas las personas durante sus ciclos vitales mediante políticas que promuevan y programas que favorecen la interacción, la cooperación y el intercambio entre distintas generaciones.
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Fuentes:
Mayores y niños que comparten centros: Construyendo una sociedad para todas las edades
España prepara el ‘boom’ de los centros intergeneracionales: mayores y niños que se hacen bien
BENEFICIOS DE LAS ACTIVIDADES INTERGENERACIONALES PARA NIÑOS Y MAYORES
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