Desde que se creó el programa de escritura por inteligencia artificial, se ha hablado de cómo afectará ChatGPT a los entornos laborales y educativos.
Esencialmente, ChatGPT es un programa que puede comunicarse y entender como un humano. Esto ha suscitado muchas preguntas y los posibles pros y contras de utilizar el programa para acciones como escribir artículos, y en un entorno escolar, tareas y ensayos.
Beneficios potenciales para el aula
ChatGPT puede facilitar muchos aspectos de la experiencia de un estudiante con capacidades para responder a preguntas de investigación, sugerir palabras y frases mientras los estudiantes están escribiendo una tarea, servir como herramienta para la tutoría lingüística y mucho más. El programa está disponible en todo momento bajo demanda para que los estudiantes lo utilicen como recurso, lo que podría ser beneficioso para los estudiantes que necesiten a alguien a quien consultar sobre su trabajo.
ChatGPT también podría beneficiar a los profesores. Un aspecto positivo de la incorporación de ChatGPT a las aulas es que proporciona un aprendizaje personalizado a los alumnos basado en sus necesidades individuales y en sus conocimientos previos. Esto puede ayudar a mantener a los estudiantes comprometidos y motivados. El programa también puede reducir la cantidad de tiempo que los profesores tienen que dedicar a corregir tareas y crear contenidos educativos.
Inconvenientes
Esencialmente, ChatGPT reduce la necesidad de interacción e intervención humana en un entorno educativo, lo que plantea preocupaciones para los estudiantes, especialmente desde que regresan a los entornos de clase en persona después de Covid-19. Por supuesto, otra preocupación derivada de la falta de humanidad del software es la falta de empatía y apoyo emocional que los estudiantes reciben de sus profesores. Además, la información que se encuentra en ChatGPT podría ser inexacta o demasiado general para ser de calidad.
Para los profesores, la desventaja más obvia de integrar el programa en el sistema educativo es la pérdida de puestos de trabajo y de confianza en su experiencia. Esto también podría conducir a una dependencia de la tecnología, ya que se puede utilizar para muchos aspectos diferentes de la clase, lo que conduce a un potencial para los educadores, y los estudiantes para el caso, a convertirse en dependientes. Además, los alumnos, acostumbrados a que sus profesores elaboren programas y tareas a mano, percibirán la falta de creatividad y emoción humanas.
En definitiva, ChatGPT es una innovación asombrosa que tiene el potencial de facilitar muchos aspectos de la vida, incluso en un entorno educativo, pero con esta herramienta vienen pros y contras que tendrán que ser evaluados antes de su plena integración en las escuelas.
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Fuente: The impact of ChatGPT on education
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