Un estudio llevado a cabo por investigadores australianos revela datos acerca de los síntomas presentados tras la abstinencia al uso de las redes de comunicación sociales como Instagram, WhatsApp, Facebook y Twitter.
Los resultados confirman que podríamos estar hablando de una epidemia social derivada de la exposición desmedida a las redes de comunicación sociales. Los síntomas de la abstinencia presentan las mismas características de otras adiciones clásicas conocidas.
El equipo, dirigido por Stefan Stieger, evaluó las reacciones de usuarios en un período de desconexión. La muestra de participantes compuesta por más de 150 personas de entre 18 y 80 años tenían como premisa no utilizar ninguna de las redes mencionadas durante una semana.
Según los investigadores, más del 60% de los participantes no pudo superar el tiempo de no exposición a las plataformas. Los usuarios acabaron “haciendo trampa” ya que consideraban que la abstención les provocaba una pérdida de contacto social lo que comportaría perderse algún acontecimiento importante.
Así mismo, se registraron índices de recaídas. El 17 por ciento de la muestra recayó una vez mientras que el 13% dos veces y el 29 más de dos. Los usuarios afirmaron sentir presión por el resto de participantes y una sensación de necesidad de interactuar en los medios sociales.
Los síntomas evaluados no diferían de los de las adiciones convencionales. Ansiedad, mal humor y aburrimiento son algunos de los efectos más comunes entre los miembros evaluados.
Sin embargo, Yalda T. Uhls, PhD, Fundadora del Centro para Académicos y Cuentacuentos de la UCLA, y autora del libro Media Moms & Digital Dads (Mamás Mediáticas y Papás Digitales: un enfoque para no tener miedo a la crianza en la era digital) afirma que “Si bien los hallazgos indican que los participantes tuvieron problemas cuando se retiraron de las redes sociales en línea, tomaría precauciones al calificarlos de adicción”.
Así pues, los investigadores involucrados en el estudio afirman que las redes de comunicación social estimulan la liberación de dopamina. El mismo efecto que provocan por ejemplo las máquinas tragamonedas. La dopamina es un químico cerebral que favorece la creación de hábitos y, por ende, adicciones.
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Fuente: Adicción a las redes sociales ¿una nueva epidemia?
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