En países latinoamericanos, expertos en Derechos Humanos señalan que, aprovechando el momento de la pandemia, aumentan los casos de destrucción ambiental y atentados a los derechos humanos.
Con la pandemia, muchos países están concentrando esfuerzos para responder a la crisis del coronavirus. Es importante que, en estos planes, la situación del medio ambiente y los derechos humanos sea atendida por los gobiernos.
En América Latina esta preocupación es aún mayor, también porque en algunos países se percibe que se han perdido varios logros y se relajan las medidas de protección y derechos ambientales.
En este contexto en el que los medios de comunicación están ocupados cubriendo noticias sobre la pandemia y la gente está preocupada por su salud y economía, muchas acciones se han aprovechado para incrementar los niveles de contaminación, explotación y otros daños a los ecosistemas y la biodiversidad.
Para controlar estas acciones, el Estado debe hacer cumplir las leyes, políticas, programas y regulaciones ambientales. También es importante reformar algunas normas para que se respeten los derechos humanos y protejan a quienes los defienden.
Además, la participación pública es necesaria. Las personas deben involucrarse en los temas ambientales del país, recordando que un ecosistema saludable es sinónimo de una sociedad con mejor salud ya que cuentan con más recursos naturales: agua, aire limpio, suelos saludables, etc.
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Fuente: Los países de América no deben debilitar la protección ambiental a la luz de la pandemia de COVID-19
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