Cómo prevenir la llegada del Parkinson

Conozca los alimentos que permiten prevenir la Enfermedad de Parkinson.

El Parkinson es una enfermedad crónica y degenerativa del sistema nervioso que se caracteriza por la falta de coordinación, rigidez muscular y temblores. Actualmente no tiene cura alguna y afecta a unos 5 millones de personas mayores de 65 años en todo el mundo.

El principal factor que influye en la aparición del Parkinson es la falta de dopamina, un neurotransmisor presente en diversas áreas del cerebro, especialmente importante para la función motora del organismo.  Aunque se desconozca el origen de esta enfermedad, es importante destacar la relación existente entre la falta de dopamina con la ingesta excesiva de ciertos alimentos, como son las grasas saturadas de origen animal, incluyendo las grasas lácteas; dietas altas en proteínas y un bajo consumo de legumbres. Todo ello favorece a la escasez de esta sustancia en el organismo.

Podemos encontrar diferentes alternativas naturales para la prevención de esta enfermedad:

El té verde: bebida antioxidante que además tiene entre sus componentes principales la dopamina. Un estudio en la National University College of Medecine de Seoul,  demostró que el té verde redujo la tasa de muerte cerebral en un 50% en ratones.

Alimentos ricos en vitamina E: la vitamina E constituye un poderoso antioxidante que puede ayudar a proteger las células del cerebro. Uno ejemplo de estos alimentos son: la espinaca, el brócoli, los frutos secos en general, etc.

La cafeína: considerado el nuevo descubrimiento de la actualidad para la prevención del Parkinson. G. Webster Ross, neurólogo en el Central Médico para veteranos de Honolulu, desarrolló un estudio a través de la ingesta de cinco tazas de café diarias. Esto evidenció que retrasa la aparición de la enfermedad e impide la evolución de la misma. Ya que la cafeína contiene altos niveles de dopamina.

Otro factor a tener en cuenta es el ejercicio. Además de escoger los alimentos adecuados, es recomendable desarrollar una rutina de actividad física en nuestro día a día. Ya que el Parkinson afecta a la parte locomotora de nuestro cuerpo (los músculos), el ejercicio, además de ayudar a prevenir, permite reducir el crecimiento de la enfermedad, ralentizando el deterioro general de los músculos y articulaciones.

Por lo tanto, podemos decir que, aunque no haya una forma exacta de prevenir o de curar el Parkinson, sí sabemos que, siguiendo una dieta equilibrada rica en antioxidantes, además de ejercitar nuestro cuerpo de una manera saludable, podemos evitar en un alto porcentaje la probabilidad de padecer esta enfermedad en un futuro.

Autor: David Sordo

Fuentes de información:

http://fnbr.es/2y0http://fnbr.es/2y1http://fnbr.es/2y2http://fnbr.es/2y3http://fnbr.es/2y4

 

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