Las personas con expectativas negativas sobre el envejecimiento pueden empeorar su condición y sus relaciones sociales.
Un estudio indica que las percepciones sobre el envejecimiento que tienen las personas pueden influir en la forma que se desarrollarán las relaciones sociales y el apoyo que logran las personas en la tercera edad. Las expectativas más positivas permiten a las personas mantener e impulsar su red de contactos sociales y lograr ayuda de amigos. Las percepciones negativas se pueden transformar en profecías autocumplidas. Las personas se pueden convertir, dependiendo de si su óptica es positiva o negativa, en cascarrabias o los abuelos perfectos.
El estudio se realizó con cuestionarios sobre una base de 12 y 24 meses, con la participación de voluntarios mayores de 60 años, en Baltimore, Estados Unidos. Se midieron las expectativas relacionadas al envejecimiento y los diferentes tipos de apoyo social que logran las personas de la tercera edad, midiendo la percepción de disponibilidad de ayuda.
Los resultados indican que las personas con expectativas más positivas en la línea de base lograron hacer más amigos dos años después de iniciar el estudio, y las mismas personas percibían que podían recibir más ayuda de sus amigos 12 meses después de iniciar la prueba. Solo aquellos con una percepción que alcanzaba al menos el promedio, mostraban una asociación entre sus expectativas y la disponibilidad de ayuda.
Se debe tener en cuenta que existe un vínculo entre las expectativas generales respecto al envejecimiento y el ámbito social de las personas, sugiere que la influencia de la percepción no solo afecta a las funciones físicas y cognitivas, sino también los lazos que se establecen con las personas alrededor.
Las especialidades de Gerontología de FUNIBER preparan a las personas para brindar asistencia a personas de la tercera edad y ayudarles a mantener un buen estado de salud físico y mental.
Fuente: The Journals of Gerontology
Fotografía Creative Commons: Cosmin Illie