En los últimos años se ha estudiado mucho el funcionamiento de los diferentes sistemas educativos del mundo. Se hacen pruebas basadas en el análisis del rendimiento de los estudiantes mediante una serie de cuestionarios realizados a miles de alumnos de diversos países, con el fin de establecer unos criterios internacionales de valoración. La más conocida es la prueba PISA.
El derecho a la educación está recogido en la declaración de derechos humanos como uno de los derechos fundamentales y cada país trata de encontrar el mejor modelo educativo de acuerdo con sus características sociales, económicas, religiosas… Está claro que hay países que destacan por el buen funcionamiento y los resultados de su sistema educativo.
Finlandia es el primero de ellos. Su sistema se caracteriza por la igualdad, equidad y cooperación, basándose “en la importancia de la educación universal, pública, gratuita y no selectiva” como explica el pedagogo finlandés Pasi Sahlberg.
Otro de los países que destaca, actualmente al mismo nivel que Finlandia, es Corea del Sur con un modelo educativo estricto y riguroso en el que los alumnos tienen una jornada continua en la escuela a lo largo del año (no hay periodos de vacaciones) de hasta 12 horas diarias.
Investigamos cómo es la formación de los profesores en estos dos países.
El profesor en Finlandia se escoge mediante un estricto proceso de selección de ámbito nacional, los candidatos deben tener en su bachillerato una nota media superior al 9. Además se espera de ellos una sensibilidad social que se valora por su participación en acciones sociales, voluntariado, etc. Las pruebas incluyen una entrevista, un resumen de una lectura, una pequeña clase magistral, pruebas artísticas como tocar un instrumento, una prueba específica de matemáticas y otra de aptitudes para las TIC. La duración de la carrera universitaria en Finlandia es casi el triple que su duración en otros países como España, e incluye unas 1400 horas de formación pedagógica.
En Corea del Sur la carrera de magisterio es la más prestigiosa y solicitada ya que tiene un gran reconocimiento social, un buen salario y estabilidad laboral. Los docentes coreanos tienen que pasar un examen selectivo muy competitivo. La formación de maestro es una carrera universitaria que dura 4 años con un acceso muy limitado: los aspirantes deben tener unas calificaciones en sus pruebas de acceso a la universidad que se encuentren en el 5% más alto de todo el país. Se le da mucha importancia a la participación de los docentes en proyectos de investigación pedagógica. Antes de la contratación definitiva se realiza una entrevista personal en la que se valoran aspectos como la vocación, las habilidades de comunicación, la creatividad y el espíritu innovador, la confianza, las cualidades de liderazgo o la posibilidad de ser un buen modelo a seguir para los estudiantes.
A estos países les siguen Japón, Holanda y Canadá, cada uno con su propio sistema educativo. Está claro que no hay una única manera de llevar la educación a su punto más alto: los dos países más destacados tienen modelos completamente diferentes, casi contradictorios. No obstante los dos coinciden en algunos aspectos fundamentales de la formación de sus docentes, como:
- el prestigio social
- la alta cualificación
- la selección de los mejores
- el trabajo en investigación pedagógica
Autora: Neila Sánchez Porras
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Fuentes: http://fnbr.es/3iz, http://fnbr.es/3j0, http://fnbr.es/3j1