La importancia de un tratado internacional sobre los océanos

En la Organización de las Naciones Unidas (ONU), una gran cantidad de países se encuentran en medio de negociaciones sobre el posible desarrollo de un tratado internacional sobre los océanos para protegerlos. El proceso de elaboración de este tratado comenzó en 2017 y, tras los retrasos debidos a la COVID-19, se reunió del 7 al 18 de marzo para celebrar la ronda final de negociaciones.

La finalización del tratado se produce tras la cumbre One Ocean celebrada el mes pasado, en la que más de 100 países llegaron a un acuerdo para reforzar este tratado. En su borrador actual, el tratado pretende abordar cuatro áreas principales de preocupación en lo que respecta a la conservación de los océanos: las formas de gestión de las grandes áreas, la forma de evaluar el impacto ambiental en los océanos, los recursos genéticos marinos (un tipo de valiosa herencia de las plantas y animales del océano) y la transferencia de tecnología marina (lo que significa esencialmente la coordinación internacional en lo que respecta a las actividades oceánicas).

Además de la presión de la cumbre One Ocean, los negociadores de la ONU también responden a las preocupaciones de otros organismos internacionales y organizaciones activistas. Por ejemplo, el grupo ecologista Greenpeace lleva mucho tiempo defendiendo la creación de santuarios oceánicos para proteger la fauna oceánica. En noticias más recientes, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) aprobó una moción oficial para solicitar un tratado internacional sobre los océanos en septiembre de 2021.

Está claro que la comunidad internacional está avanzando en el reconocimiento de la importancia de un tratado internacional sobre los océanos, pero vamos a desglosar los detalles de su importancia.

El océano es notoriamente difícil de regular. Hay zonas económicas exclusivas (ZEE) que caen bajo la jurisdicción de ciertos países, pero aproximadamente el 64% del océano está fuera de estas zonas. Esta zona comprende el 95% de la Tierra en la que existen organismos vivos, pero el total de esta zona que está protegida es inferior al 1%.

Dado que gran parte de esta zona no pertenece a ninguna nación, el alta mar suele ser víctima del fenómeno conocido como «tragedia de los comunes», ya que muchos actores individuales tratan de cosechar los beneficios de los recursos que proporciona el océano. Desde 1982, el transporte marítimo en el océano se ha disparado un alucinante 1.600%. Con el aumento de la demanda de petróleo y gas en alta mar, ha proliferado la minería de aguas profundas. En 2020, se extrajo una media de 15 millones de barriles de petróleo y gas de aguas profundas cada día.

Aunque la comunidad internacional ha realizado otros esfuerzos para proteger el océano, como el acuerdo 30×30 que promete un 30% de toda la tierra y el mar para 2030, no existe un acuerdo jurídicamente vinculante sin un tratado como el que se está estudiando actualmente. Con un curso de acción legal claro en el marco de un tratado, los organismos internacionales pueden proteger mejor la biodiversidad esencial del océano que nos proporciona numerosos beneficios.

El océano tiene un gran papel que desempeñar en nuestra futura lucha contra el cambio climático. Para aprender sobre la interacción entre el medio ambiente y la conservación marina, considera la posibilidad de cursar una de las Maestrías de Medio Ambiente que patrocina FUNIBER, como la Maestría en Ciencia y Tecnología Marina.

Fuentes:

UN ocean treaty is ‘once in a lifetime’ chance to protect the high seas

Key International Body Urges U.N. to Finalize Treaty to Protect High Seas by Early 2022

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