Los beneficios de comer semillas de sandía
Usualmente las pepitas de sandía son eliminadas y solemos comer solo la pulpa de la fruta, pero el consumo de semillas de sandía puede aportar a nuestro organismo importantes nutrientes. Cristina Lafuente Gómez, dietista y nutricionista de Alimmenta, indica que por cada 100 gramos de semillas de sandía se obtienen 515mg de magnesio, 10,2mg de zinc, 1,6mg manganeso, 28,3g de proteínas, 47,4g de grasas y 28,1 gramos de grasa poliinsaturada. Leer más
Calentamiento global amenaza la salud de millones de personas
Durante la última ola de calor que se produjo en India murieron miles de personas. En los países desarrollados no se presentan muchas muertes, pero los investigadores señalan que la amenaza del calentamiento global podría ser tan grande, que podría minar los avances logrados en salud en los últimos 50 años. Por esta razón, The Lancet ha conformado una comisión de estudio, para proponer políticas para proteger la salud de la población frente a los cambios que ocurrirán como consecuencia del calentamiento global. Leer más
Identifican grupo de neuronas que controlan el apetito
Dos equipos de investigadores han identificado grupos de neuronas que gestionan la información relacionada con los alimentos que recibe el cerebro. Este sería el primer paso para desarrollar tratamientos que podrían ayudar a reducir la obesidad a nivel global. Los científicos indicaron que un grupo de neuronas que controlan el apetito se activan en el área del hipotálamo cuando la persona pierde entre el 5% y el 10% del peso corporal. Pero su investigación no se detuvo en este punto, y han logrado modificar la sensación de saciedad manipulando directamente dicho grupo de neuronas. Leer más
CAN: La estrategia para bajar de peso
En muchos tipos de dieta se asume que la persona tiene la fuerza de voluntad suficiente para evitar comer alimentos poco saludables. Pero un equipo de investigadores ha identificado un método que puede ayudar a mejorar las posibilidades de tener éxito al hacer una dieta. Se le ha llamado el método CAN, porque propone que la comida debe ser (C) conveniente, (A) atractiva y (N) normal. Bajo este método, una estrategia para no comer alimentos poco saludables sería almacenarlos en el sótano. Leer más