La relación entre la dieta y las enfermedades cardiovasculares siempre ha sido un tema de interés científico. Un estudio publicado en la revista LANCET revela información preocupante sobre la ingesta de alimentos ultraprocesados (AUP) y su influencia en el riesgo cardiovascular.
Las enfermedades cardiovasculares (ECV) se mantienen como la principal causa de muerte prematura a nivel mundial, en el Reino Unido, por ejemplo, alrededor de 7.6 millones de personas viven con ECV. Esta situación también tiene un costo significativo para la economía del país, alcanzando los £19 mil millones anuales. Entre todos los factores de riesgo modificables, la promoción de patrones dietéticos saludables se presenta como una estrategia altamente rentable para prevenir estas enfermedades.
El impacto positivo de las dietas basadas en plantas en la salud
En particular, los patrones alimentarios basados en plantas y su asociación con un menor riesgo de enfermedades crónicas hacen hincapié en el impacto positivo tanto en la salud pública como en el medio ambiente. En los últimos años, se ha observado un aumento en el consumo de alimentos de origen vegetal, promovido por recomendaciones nacionales e internacionales que buscan reducir el consumo de carne, especialmente carne roja, y enfocarse en una mayor ingesta de productos de origen vegetal altos en fibra y nutrientes. No obstante, es importante mencionar que los patrones alimentarios basados en plantas son diversos y pueden variar en su composición y calidad.
El efecto de los AUP de origen vegetal en la salud cardiovascular
Por otro lado, los alimentos ultraprocesados pueden incluir bebidas azucaradas y snacks, pero también alimentos alternativos «de origen vegetal» que son producidos con ingredientes a base de plantas y son comercializados como sustitutos de la carne y los lácteos, como las salchichas, nuggets y hamburguesas. Sin embargo, se ha demostrado que el consumo excesivo de AUP se asocia con una serie de problemas de salud, como trastornos cardiometabólicos y alteraciones de la salud mental. Por lo tanto, el objetivo de este estudio, titulado «Implications of food ultra-processing on cardiovascular risk considering plant origin foods: an analysis of the UK Biobank cohort», ha sido evaluar el riesgo potencial de ECV asociado con la contribución dietética de las dietas basadas en plantas y diferenciar entre el impacto de los alimentos ultra procesados de origen vegetal.
Hallazgos alarmantes
Según el estudio, por cada aumento del 10% en la ingesta de alimentos no ultra procesados de origen vegetal, el riesgo de enfermedad cardiovascular se redujo en un 7%. Sin embargo, por cada aumento del 10% en la ingesta de alimentos UPF de origen vegetal, el riesgo de enfermedad cardiovascular aumentó en un 5%. Estas relaciones también se reflejan en la mortalidad, donde el riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular asociado al consumo de alimentos no ultraprocesados de origen vegetal se reduce en un 13%; mientras que el riesgo de muerte asociado al consumo de alimentos AUP de origen vegetal aumenta en un 12%.
Riesgos concluyentes y recomendaciones fundamentales
Estos hallazgos demuestran que es necesario tener en cuenta que, a pesar de ser de origen vegetal, las dietas ricas en AUP aún pueden presentar riesgos para la salud debido a su composición y métodos de procesamiento. Los AUP tienden a ser altos en grasas no saludables, sodio y azúcares agregados, lo que contribuye a enfermedades cardiovasculares, dislipidemia, aterosclerosis, hipertensión, resistencia a la insulina, obesidad y otros trastornos metabólicos.
En conclusión, los hallazgos de este estudio apuntan a la necesidad de enfocarse en alimentos de origen vegetal mínimamente procesados para lograr los beneficios óptimos para la salud cardiovascular. Los cambios en los patrones de consumo pueden tener un impacto significativo en la disminución de las enfermedades cardiovasculares y mejorar la salud general.
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