El impacto de los microplásticos

Los microplásticos impactan de manera imperceptible pero negativa en nuestra salud. 

Su tamaño diminuto, inferior a cinco micras, les permite viajar por tierra, aire y mar para acabar en los campos de cultivo, en el pescado que comemos o en el propio aire que respiramos. 

¿Cómo se generan los microplásticos?

Los microplásticos pueden formarse a partir de la degradación en la naturaleza de piezas plásticas de mayor tamaño o fabricarse al efecto en ese diminuto tamaño. Provienen de una gran variedad de fuentes como neumáticos, productos cosméticos, ropa o desechos plásticos de uso cotidiano, entre otros. 

Se estima que entre el 2% y el 5% de todos los plásticos fabricados termina en los océanos, algunos de ellos en forma de microplásticos. Tanto es así que se han detectado microplásticos en orina y heces humanas, incluso en las placentas de bebés antes de nacer.

Los peligros de la contaminación por microplásticos

Además de la cantidad de plástico que usamos en el día a día, uno de los principales problemas viene de la dispersión. Y es que estos contaminantes no se quedan en el foco de emisión sino que se desplazan por todo el planeta, llegando a zonas tan remotas como el Ártico o la Antártida.

Si esta dispersión no era suficiente, los microplásticos acarrean consigo la toxicidad del propio material. Muchos de los productos químicos que transporta el polímero son altamente nocivos para la salud, según señalan investigaciones del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua del CSIC.

¿Cuál es la solución?

Intentar controlar la dispersión de estas partículas en el medio ambiente se vuelve  imposible. Por ello, la solución más efectiva reside en el origen: eliminar los plásticos de un solo uso en cuya fabricación no se emplean materiales uniformes que puedan seguir líneas de recuperación.

En este sentido, la forma más eficiente de luchar contra la proliferación de microplásticos es la prohibición del material de un solo uso y el fomento de los envases de componente uniforme que permita su reutilización. Así, la Unión Europea ha acordado prohibir en 2021 este tipo de plásticos y sustituirlos por alternativas sostenibles. 

FUNIBER promueve los estudios en el área medioambiental, con programas como la Maestría en Cambio Climático o en Proyectos de Gestión Ambiental para la formación de profesionales interesados en ampliar sus conocimientos acerca de la conservación del medio ambiente. 

Fuente: Invasión de microplásticos por tierra, mar y aire: ¿cómo impacta en la salud?

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