Estudio identifica que mantenerse activo a nivel intelectual puede ser útil para evitar la demencia en la tercera edad.
Investigadores indican que el riesgo de padecer demencia se ha reducido entre aquellas personas que al menos cuentan con educación secundaria, de acuerdo a un estudio en el que se indica que introducir mejoras en el estilo de vida y en la salud física permite prevenir o retrasar la reducción de la capacidad cognitiva.
Los investigadores consideran que las políticas que permiten brindar a la población una mejor educación y un mejor cuidado de la salud cardiovascular estarían ayudando a reducir los casos de demencia o al menos retrasar la aparición de la enfermedad. Las proyecciones han cambiado con el tiempo, y se está abriendo una ventana de esperanza para reducir el impacto de enfermedades como el Alzheimer entre la población. La prevalencia de la demencia en la población de Estados Unidos se redujo en un 21% entre el año 2000 y el 2010.
Los investigadores indican que se podría trabajar en una estrategia para reducir los niveles de demencia aún sin contar con medicamentos, para prevenir enfermedades como el Alzheimer. Los estudios indican que en la década de los años 70 las personas podían sufrir de demencia al cumplir los 80 años, pero la edad mínima se elevó a los 85 años al evaluar pacientes 40 años después.
Un estudio liderado por el Dr Langa, profesor de medicina en la Universidad de Michigan, involucró a 10.000 personas mayores de 65 en el año 2000 y luego se estudió a un grupo similar en el 2010, identificando que aquellos que obtenían un grado universitario tenían menor riesgo de padecer demencia. «Encontramos que más educación es mejor», por tanto estudiar sería una buena estrategia prevenir la demencia senil, en opinión del investigador.
Existen muchas teorías para explicar el hecho que la educación puede influir en la reducción de la demencia, algunos investigadores consideran que una mejor educación permite acceder a un mejor nivel de vida, aliviar los problemas económicos y acceder a mejores servicios de salud, pero el origen de la enfermedad no se puede explicar con certeza. Los resultados de las investigaciones no se aplican en todos los casos, pues algunos estudios indican que existen diferencias en los resultados al evaluar distintos grupos étnicos, en algunas evaluaciones realizadas en Estados Unidos se identificó que los Afroamericanos tenían una tendencia más elevada a sufrir demencia, los asiáticos eran la población con menos posibilidades de padecer la enfermedad, y los latinos y blancos quedaban en un rango intermedio.
Las investigaciones continúan y los nuevos descubrimientos tanto a nivel de fármacos como cambios en los estilos de vida para prevenir enfermedades como el Alzheimer continúan brindando esperanza a las personas que avanzan en el camino de la tercera edad. Los estudiantes del área de Gerontología de FUNIBER se preparan para brindar las mejores recomendaciones a los adultos mayores para mantener un estilo de vida que les permita mantener un óptimo estado de salud.
Fuente: NY Times
Fotografía Creative Commons: David Reece