La Dra. Isabel Martorell es coordinadora del Doctorado en Nutrición de FUNIBER y experta en el área de toxicología alimentaria. Martorell tiene una amplia experiencia en el campo de la investigación sobre nutrición y resalta que los alimentos nos aportan gran cantidad de nutrientes, como ácidos grasos, proteínas, vitaminas y minerales, pero se debe tener cuidado con la ingesta de alimentos porque también podrían ser portadores de diferentes contaminantes.
Isabel Martorell es Dietista-Nutricionista doctorada en el programa de Biomedicina por la Universidad “Rovira i Virgili” de Reus (España), especializada en Toxicología Alimentaria; obtuvo además el grado de Máster en Nutrición y Metabolismo en la misma Universidad. Hasta el momento Martorell cuenta con cinco publicaciones científicas, y ha ganado premios a la investigación como: el Premio Fundación Mapfre, Ayudas a la investigación 2009, Protocolo de actuación, el TOOLTIPS Competition Award y la Ayuda para la valorización del conocimiento 2012 (R2B2012). Actualmente, se desempeña como coordinadora y profesora del área de Salud y Nutrición de la Fundación Universitaria Iberoamericana (FUNIBER), también es profesora de la Universidad internacional Iberoamericana (UNINI México) y de la Universidad Europea del Atlántico (UNEATLANTICO- España). A continuación, Isabel nos ofrece algunas recomendaciones para mantener una alimentación libre de contaminantes.
Los contaminantes son sustancias que se añaden de forma no intencional a los alimentos en algún punto de la cadena de producción, comercialización o como consecuencia de la contaminación medioambiental, a diferencia de los residuos, que son sustancias que se incorporan de forma no intencional, solo en el proceso de producción de alimentos.
Martorell indica que entidades como la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), entre otros organismos públicos, son los encargados de garantizar la seguridad de los alimentos que consumimos, en algunos casos, como en el caso del pescado azul, las entidades públicas emiten alertas en las que se recomienda limitar la ingesta de ciertos alimentos.
Pescados como el pez espada, el lucio, el tiburón, el atún o la merluza son especies que son ricas en ácidos grasos omega 3, pero también contienen metilmercurio, un contaminante químico de elevada toxicidad. Este es uno de los ejemplos más relevantes en el ámbito de la toxicidad alimentaria y se recomienda, sobre todo en el caso de mujeres embarazadas y niños pequeños, evitar el consumo de los pescados antes indicados.
La profesora del área de Salud y Nutrición de FUNIBER, indica que los alimentos pueden contaminarse al entrar en contacto con plomo, cadmio, mercurio, substancias perfluoradas, pesticidas y más. Los profesionales de la salud deben prepararse para brindar las mejores recomendaciones a sus pacientes, y se debe tener en cuenta que una dieta «perfecta» desde el punto de vista de un nutricionista, puede ser elevada en tóxicos.
Martorell indica que los Dietistas-Nutricionistas deben reconocer situaciones en las que se produzca la contaminación de alimentos y deben intervenir realizando estudios o planteando recomendaciones nutricionales orientadas a la población en general o a grupos específicos, como mujeres en edad fértil o niños.
Alimentos peligrosos
Los contaminantes químicos orgánicos persistentes son los que causan mayor preocupación, porque son de naturaleza acumulativa. El metilmercurio es el componente orgánico de mercurio más común en la cadena alimentaria, sobre todo presente en los pescados y mariscos. Martorell afirma que esta sustancia afecta el sistema nervioso central en desarrollo, afectando principalmente a los fetos y niños pequeños, debiendo evitarse el consumo de este contaminante por mujeres embarazadas o en etapa de lactancia.
La EFSA alertó en el 2012 que el consumo máximo de metilmercurio podría ser de 1,3 µg por cada kilo de peso corporal en adultos, mientras que los niños entre 3 y 12 años deberían reducir el consumo de pescados como el pez espada, el atún rojo o el lucio a solo 50 gramos por semana o 100 gramos cada dos semanas.
Martorell destaca que una alimentación saludable y variada será la clave para reducir los riesgos, y la asesoría de un profesional de la salud siempre ayudará a mantener una dieta equilibrada que nos permita obtener nuestro máximo desempeño.
A continuación la Dra. Isabel Martorell nos brinda una entrevista en video en la que explica algunos temas sobre toxicología alimentaria y nos proporciona información importante para que podamos mantener una dieta equilibrada y saludable, reduciendo la ingesta de sustancias tóxicas.
Nota: La profesora Isabel Martorell participa en la Red Universitaria en la que colabora FUNIBER.