Autoridades de Chile y México decretaron la alerta amarilla después de registrar actividad volcánica inusual.
El sábado pasado un terremoto de 7,8 grados en la escala de Richter sacudió la zona costera de Ecuador, causando más de 413 muertos y miles de heridos. Horas más tarde, autoridades de Chile y México emitieron comunicados en los que se anunciaba la alerta amarilla por la actividad registrada en los volcanes Villarrica y Popocatépetl respectivamente.
En Chile, el Observatorio Volcanológico de Los Andes del Sur (OVDAS) del Servicio Nacional de Geología y Minería (SERNAGEOMIN), informó que la actividad del volcán Villarica se ha reducido, después de la crisis que se presentó en la región el pasado 03 de abril, pero indicaron que se mantiene la alerta volcánica en Nivel Amarillo para las comunidades de Villarrica, Pucón y Curarrehue.
Las autoridades chilenas indicaron que se registraron «disparos sísmicos» en el lado Este Sureste del cráter principal. Los investigadores indicaron que la actividad sugiere que se está produciendo un movimiento de magma en profundidad, el cual podría desestabilizar el sistema.
En México, se registró el 18 de abril un incremento de la actividad volcánica, y las autoridades decidieron establecer la alerta amarilla para proteger a los pobladores de las zonas cercanas al volcán Popocatépetl.
Los investigadores indican que el volcán arrojó material incandescente a 1,6 kilómetros de sus laderas y las cenizas se elevaron hasta tres kilómetros de altura, cubriendo con una capa de ceniza la ciudad de Puebla y obligando al cierra del aeropuerto de dicha localidad.
Las autoridades del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) de México, recomendaron a las personas que habitan en los alrededores del volcán Popocatépetl, que «se preparen para enfrentar una alerta mayor», guardando agua potable, alimentos y protegiendo los documentos más importantes.
El Cenapred vigila la actividad del volcán Popocatépetl con cámaras de video durante las 24 horas.
Los estudiantes del área de Medio Ambiente de FUNIBER se preparan para proponer estrategias para mitigar el impacto de los desastres naturales.
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