Un estudio publicado recientemente en la Revista Española de Geriatría y Gerontología ha demostrado que los adultos mayores que toman partido en actividades sociales gozan de una mejor salud mental y física.
La soledad y el aislamiento son dos de los problemas a los que se enfrentan las personas de la tercera edad. Estos pueden acarrear problemas de salud, tanto a nivel físico como psicológico. Por consiguiente, para evitar estas consecuencias negativas, es importante que los adultos mayores se socialicen.
En este sentido, una investigación realizada por Ana Isabel Bermeja y Berta Ausín ha determinado que la participación de las personas mayores en programas de socialización ayuda a reducir el sentimiento de soledad. Así, estas actividades pueden consistir en terapias con animales, videoconferencias con familiares, intervenciones cognitivas, talleres de horticultura y jardinería o ejercicios de memoria.
Igualmente, Gayatri Devi, directora de la clínica Park Avenue Neurology de Nueva York (Estados Unidos), ha insistido en que, para tener un envejecimiento feliz, los adultos mayores han de mantener una actitud positiva, practicar regularmente ejercicio o hacer amigos de distintas edades.
Además, la geriatra ha manifestado que “una de las mejores cosas de envejecer es que ya no se tiene tanto miedo al fracaso”. Por eso, ha señalado que las personas de la tercera edad han de realizar aquellas actividades que más les apetezcan.
Por su parte, el Dr. Daniel B. Kaplan, de la Adelphi University (Estados Unidos), ha añadido que la soledad puede ser combatida también por medio de la práctica del voluntariado. A este respecto, la Maestría en Gerontología patrocinada por FUNIBER transmite a sus alumnos las capacidades necesarias para estimular a los adultos mayores en la práctica de actividades que disminuyan su soledad.
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