La importancia de un logo

Al Ries y Jack Trout manifiestan en su  libro "las 22 leyes inmutables del marketing" que el objetivo esencial de esta disciplina  es generar percepciones en el consumidor.  Sin importar las características del producto,  la imagen que un consumidor perciba respecto a un determinado bien o servicio impulsará o afectará negativamente la venta final. Todas las marcas comunican una imagen a su audiencia a través de su logo. El logo pretende transmitir a los clientes determinados valores que caracterizan a la empresa y, es este elemento el que permite establecer el primer punto de contacto con los clientes. Leer más

Crecer en la adversidad

La crisis económica puede ser una oportunidad de crecimiento si es bien aprovechada por las pymes.  Se debe ser cuidadoso al dar el salto que permita la conquista de nuevos mercados, pero si se trabaja con diligencia se puede aprovechar la adversidad para alcanzar productos o servicios a consumidores que otras empresas no atienden. Leer más

El emprendedor tecnológico y el desafío del salto a las grandes ligas

El mundo ha evolucionado mucho a lo largo de los últimos 10 años en su capacidad de innovación tecnológica, y en la formación de empresas de base tecnológica que logran posicionarse a nivel regional como proveedores confiables y con amplio crecimiento. No obstante, creo que muchas PyMES tecnológicas -dada la etapa de madurez en que se encuentran- van encontrándose con el desafío de transformarse en grandes compañías, con números de dotación de personal que no habían sospechado al comenzar sus actividades. Y es aquí donde hay algunos peligros latentes que es interesante considerar, ya que la respuesta tradicional a la necesidad de "formalizar" o profesionalizar a las organizaciones puede no ser apta para las empresas tecnológicas. Leer más

Cómo escapar a la ensalada de indicadores

En su libro sobre Good to Great, Jim Collins, menciona como una de las características centrales de las empresas que han sostenido su crecimiento a lo largo del tiempo, el hecho de que suelen medir su éxito por un indicador casi exclusivo. Es decir, más allá de que se midan muchas variables, lo que tienen en claro estas compañías es qué indicador deben usar para saber si están logrando sus objetivos a lo largo del tiempo. En rigor, Collins menciona que la mayor claridad de las compañías se da en relación a “el denominador” del ratio que sirve como indicador; el numerador es siempre la rentabilidad.  Es decir, siempre el indicador utilizado es “rentabilidad por…”.  Así por ejemplo, Collins menciona que la cadena de farmacias estadounidense Walgreens se mide a lo largo de los años en relación al índice de rentabilidad por visita a sus tiendas, mientras que Gillette se mide por rentabilidad por cliente y Philip Morris por rentabilidad por marca. El autor de Good to Great señala que la selección de estos indicadores refleja un profundo entendimiento del propio negocio, y que solo el proceso de seleccionar cuál debería ser este indicador ya es enriquecedor en sí mismo, al ser una discusión sobre las características del negocio. Es decir, si logramos consensuar cuál es nuestro denominador, estaremos de acuerdo en las variables centrales de nuestro negocio. Leer más