Consejos para una mejor digestión

Cuando hay celebraciones de por medio, a pesar de nuestro deseo por comer saludable, muchas veces terminamos más que saciados, y –en algunos casos- con pesadas digestiones que hasta implican ardor y dolor de estómago.  Y es que el hecho de comer una comida copiosa puede producir sensación de ‘digestión pesada’, dolor en el abdomen o distensión, según explica la doctora Irene Bretón, del grupo de nutrición de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN). Los síntomas se acentúan si hablamos de comidas ricas en grasas o se le agrega un consumo considerable de alcohol.
Frente a esta situación, aquí tenemos ocho secretos de qué y cómo debemos comer para evitar los problemas digestivos, especialmente cuando hay celebraciones de por medio.

Limitar la cantidad
Aunque resulte obvio, hay que decirlo, lo primero es comer menos, comer con moderación. Hay que servirse porciones pequeñas. Si tenemos al frente tres piezas de carne, lo mejor será tomar solo una o quizás dos. Según comenta Ángel Gil, presidente de la Fundación Iberoamericana de Nutrición (FINUT), se puede comer lo mismo, pero en cantidades más pequeñas. Lo importante es hacerlo con moderación.
Otra recomendación del experto es que una buena comida debe incluir algo de fruta. Pone como ejemplo lo siguiente para una celebración: unos entremeses, una sopa o ensalada de fruta y una pieza de carne o pescado. Sin embargo, nunca en abundancia, remarca el especialista, insistiendo en que la mejor prevención es comer de manera moderada.

Menos grasas y alcohol
Uno de los efectos que producen las grasas es un retraso en el vaciamiento del estómago. Así que el consumo excesivo de dulces, salsas, carnes o pescados muy grasos, así como embutidos, puede terminar en dolor abdominal, náuseas e inclusive en vómitos.
Asimismo, según explica la doctora Breton, la ingesta excesiva de alcohol puede provocar alteraciones en los movimientos del esófago y la presión del cardias. Esta situación propicia el reflujo y puede terminar en esofagitis. Otra consecuencia es que el alcohol puede dañar la barrera gástrica, ocasionando una gastritis aguda y además retrasar el vaciamiento del estómago. Debido a esto Breton concluye que el consumo de grandes cantidades de alcohol puede tener consecuencias más graves.
La experta también advierte a las personas que tienen alteraciones digestivas, como hernias de hiato o piedas en las vesículas, así como a aquellas que toman medicamentos como antinflamatorios, estar alertas, pues son más sensibles al daño que puede producir una comida demasiado abundante o desbordante en grasa. Agrega que quienes sufren de colelitasis o de piedras en la vesícula podrían experimentar síntomas como dolor absominal, náuseas o vómitos.

Postres de fruta o helados de agua
De la misma manera que se recomienda que la comida lleve frutas, también se aconseja que lo lleven los postres. Para favorecer la digestión los mejores aliados son una fruta o un helado de agua, no los de leche, precisa el profesor Gil. Advierte que si se trata de jugo de naranja algunas personas deben tomar precauciones, pues no a todos les cae bien. En algunos casos puede favorecer la digestión, pero puede no ser así en algunas personas. Gil también recomienda que la pieza de fruta sea entera, por ejemplo, un mango o una naranja.

Infusiones después de la comida
Una manzanilla, té, tilo o una menta son recomendables.

Sin licor
A pesar de que existe la creencia de que un sorbo de licor ayuda a la digestión, esto no es así. De la misma forma que el vino, solo se trata de un componente placentero de las comidas, sentencia Gil. Un sorbo de licor no va a caer mal, pero tampoco favorece la digestión.

Salir del sedentarismo
Tras una abundante comida, hay que evitar el sedentarismo, aconseja Bretón. Esto implica estar mucho tiempo en un asiento, y peor aún, recostados. Lo recomendable es caminar, dar un breve paseo, lo cual puede resultar beneficioso para mejorar cualquier síntoma de incomodidad. Otra recomendación es tomar suficiente agua.

Agua y fibra en las próximas comidas
Si nos abandonamos a un exceso en la alimentación, lo mejor será compensarlo en las siguientes comidas, procurando que sean ricas en agua y fibra. Bretón sostiene que la compensación debe hacerse con alimentos ligeros, ricos en agua y fibra. Por ejemplo, se puede recurrir a las frutas y verduras.

Horarios establecidos
La SEEN recomienda que es importante mantener una regularidad en los horarios alimenticios y si hay celebraciones tratar de no cambiarlos excesivamente.

Esperar una hora antes de dormir
Las comidas abundantes son más pesadas que las regulares, así que si hemos tenido un copioso banquete, es recomendable evitar irse a dormir al menos una hora después de la comida, indica la doctora Bretón, precisando que esto es muy importante para quienes padecen de hernia de hiato.

Fuente: El Mundo
Enlace: http://www.elmundo.es/salud/2014/12/31/54a2f7b522601df23f8b456b.html

 

 

 

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