Un nuevo estudio realizado en Estados Unidos, indica que los niños que participan en la cocina, ya sea en clases de cocina o en casa, podrían ser más propensos a alimentarse con dietas más saludables. Los investigadores no lograron obtener conclusiones potentes porque la investigación estuvo basada en diversos estudios con cierto grado de diferencias, pero lograron identificar tendencias en los niños que participaban en la cocina: Los menores incrementaban su consumo de frutas, verduras y fibra dietética; manifestaban un mayor deseo de probar alimentos nuevos y lograban mayor confianza en su habilidad para preparar alimentos.
Se estima que más de un tercio de los adolescentes en Estados Unidos eran obesos en el 2012. Al parecer la tendencia del incremento del peso se originó desde 1980, como consecuencia de una reducción de la cantidad de comidas que las personas consumían en casa. Sara Haas, vocera de la Academia de Nutrición y Dietética, indicó que el tiempo es un factor relevante, porque al parecer los padres no tienen tiempo y quizá no hayan aprendido a cocinar comida saludable.
Al parecer las clases de cocina para niños influyen de manera positiva en las preferencias y conductas alimentarias de los pequeños. Con una adecuada educación alimenticia, se podrían crear hábitos saludables duraderos.
Algunos programas educativos de cocina enseñan a los niños cómo identificar los alimentos saludables y cómo prepararlos. En dichos programas se enseña a los niños que es muy importante que coman cinco frutas y verduras al día.
El equipo de investigadores realizó una revisión de ocho estudios y realizaron diversas pruebas en distintos programas educativos de cocina. Los niños que asistieron a las clases tenían entre 5 y 12 años de edad. Los hallazgos del estudio fueron publicados en la revista Preventing Chronic Disease: Public Health Research, Practice and Policy.
Los niños que son expuestos a alimentos nuevos desarrollan una asociación positiva que les permitirá comer de manera saludable en el futuro.
Los investigadores indicaron que para obtener resultados concluyentes se requiere realizar una mayor cantidad de estudios sobre el tema. Se requiere realizar estudios que permitan identificar si los niños que participan en programas de cocina son más propensos a comer fruta y verduras cuando son adultos.
Fuente:
http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/news/fullstory_149716.html
Foto:
http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Recipes_for_Healthy_Kids_-_Sante_Fe_-_Flickr_-_USDAgov.jpg