Consumo de carne roja podría aumentar el riesgo de padecer cáncer de mama

Un estudio identificó que las mujeres que consumían mayor cantidad de carne roja incrementaron su riesgo de padecer cáncer de mama hasta en un 25 por ciento. Adicionalmente se identificó que al reemplazar una porción de carne roja al día por una combinación de pescado, legumbres, frutos secos y aves, permitía reducir el riesgo de cáncer de mama hasta en un 14 por ciento. Algunos investigadores manifestaron no estar de acuerdo con los resultados de este estudio, e indicaron que las personas que comen menos carnes rojas podrían llevar un estilo de vida más saludable y gracias a esa condición podrían reducir el riesgo de contraer cáncer.

El estudio, en el que se hizo un seguimiento por 20 años de duración, a casi 89 mil mujeres, permitió identificar que al reducir la ingesta de carne roja se puede disminuir el riesgo de padecer cáncer de mama y otras enfermedades crónicas como  enfermedades cardiacas coronarias, accidente cerebrovascular y otros tipos de cáncer.

Maryam Farvid, del Departamento de Nutrición de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Harvard y líder de la investigación, indicó que reducir la ingesta de carne roja y reemplazarla por otras fuentes saludables de proteína en la dieta, como el pavo, pescado, frijoles, lentejas y frutos secos, podría tener un importante impacto en la salud pública.

Farvid indica que, de acuerdo a los resultados del estudio, las mujeres que comían 1.5 porciones de carne a diario, parecían tener un riesgo de cáncer de mama un 22 por ciento más alto que aquellas que  consumían una porción semanal. Adicionalmente se identificó que las personas que consumían una porción de carne adicional a diario, incrementaban el riesgo de padecer cáncer de mama en un 13 por ciento.

Al reemplazar el consumo de carne roja por carne de aves, se redujo el riesgo de cáncer de mama en un 17 por ciento en general, y hasta un 24 por ciento entre mujeres postmenopaáusicas, indicaron los autores del estudio.

Farvid indicó que son diversos los factores que podrían incrementar el riesgo de contraer cáncer. Por un lado la especialista indicó que durante la cocción de la carne roja a altas temperaturas se crean productos secundarios cancerígenos, además se debe considerar la influencia de las hormonas utilizadas para aumentar el crecimiento del ganado, y la adición de conservantes como el nitrato o nitrito que se utilizan en la producción de carne procesada.

Mujeres entre 26 y 45 años de edad participaron en el Estudio de Salud de las Enfermeras II, completando los cuestionarios sobre dieta que se les proporcionaron en los años 1991, 1995, 1999, 2003 y 2007. Se registró el consumo de carne roja no procesada como cerdo, res o hamburguesas y carne roja procesada como  perros calientes o salchichas.

También se preguntó a los participantes del estudio sobre la frecuencia de consumo de aves, pescado, legumbres y frutos secos.

El Dr. David Katz, director del Centro de Investigación sobre la Prevención de la Universidad de Yale, indicó que reemplazar  una porción de carne con legumbres, pescado o aves tiene el potencial de lograr una reducción del cáncer de mama en un 15 a 20 por ciento relativo, por tanto el resultado «es suficiente como para que importe», resaltó el especialista.

La Dra. Stephanie Bernik, jefa de cirugía oncológica del Hospital Lenox Hill en la ciudad de Nueva York, manifestó que el estudio «no era definitivo» y que cabía la posibilidad de que las mujeres que comían carne roja quizá tuvieran un estilo de vida más saludable y eso reduce su riesgo de cáncer. Sin embargo la especialista reconoción que el consumo de carne roja se ha asociado en otros estudios al riesgo de padecer cáncer de colon y de próstata.

Fuente
http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/news/fullstory_146789.html

Foto CC:
Johan