Una buena noticia para los pacientes de diabetes tipo 1. Se han dado los primeros pasos para lograr una cura para dicha enfermedad. Investigadores del Instituto Gladstone (EEUU) han desarrollado métodos para reprogramar células epiteliales y convertirlas en células pancreáticas productoras de insulina. Las primeras pruebas en animales de laboratorio han resultado exitosas.
Los científicos han publicado los resultados de su estudio en la revista Cell Stem Cell, indicando que el tratamiento desarrollado permitiría reponer las células destruídas por la enfermedad.
Utilizando la medicina regenerativa, el equipo de investigadores logró recopilar fibroblastos de ratones y transformarlos en células endodérmicas, al utilizar una combinación de moléculas y factores de reprogramación. Luego utilizando otros procedimientos químicos lograron transformar las células endodérmicas en células que imitan a las precursoras pancreáticas, a las que se les denominó PPLC.
«Nuestro objetivo inicial era provocar que estas células PPLC madurasen y se convirtiesen en células que, como las células β, respondiesen a las señales químicas correctas y secretasen insulina. Y nuestro experimento inicial, en una placa Petri, lo consiguió», indicó Ke Li, autora principal del estudio.
Al realizar las pruebas en animales vivos, se identificó que tras realizar el transplante de las células, los niveles de glucosa de los animales descendieron hasta alcanzar niveles cercanos a los normales. Más tarde, al extraer las células se produjo un pico de glucosa, con lo cual se demuestra que hay un vínculo directo.
Durante el experimento se pudo comprobar que ocho semanas después del transplante, las células PPLC habían producido células β secretoras de insulina. Estos resultados indican que en el futuro este método podría utilizarse para desarrollar tratamientos personalizados para los pacientes, de acuerdo a lo mencionado por los especialistas.