Un equipo de investigadores de la Universidad de Oviedo han logrado marcar el azufre de la levadura de cerveza con un método no reactivo. Este elemento permitirá analizar el metabolismo del azufre, analizando los aminoácidos y proteínas donde se va incorporando. El nuevo procedimiento será de utilidad para analizar el metabolismo de este micronutriente en animales vivos y entender cómo actúan los fármacos azufrados en el organismo.
Resulta esencial el estudio del azufre, porque cumple un rol importante en la composición de cisteína y metionina, dos aminoácidos esenciales para la formación de proteína animal. Hasta ahora se podía estudiar las interacciones del azufre en el organismo utilizando isítopos radioactivos, sobre todo con el azufre-35. Pero ahora se halogrado refinar una técnica que permite obtener azufre-34, un isótopo estable que no es radiactivo.
El doctor Justo Giner Martínez-Sierra, coautor de este trabajo, indica que este nuevo método de investigación permitirá seguir la pista del azufre sin el riesgo que implica utilizar sustancias radioactivas.
En este momento el procedimiento consiste en marcar levadura de cerveza (Saccharomyces cerevisiae) con este isótopo estable inocuo y luego suministrarlo a roedores. Gracias a este nuevo elemento se está estudiando el metabolismo básico del azufre y sus aminoácidos, analizando el proceso de intercambio protéico, que implica la síntesis y degradación de proteínas. Adicionalmente se está utilizando el nuevo componente, en el estudio de drogas y medicamentos que contienen azufre en su estructura.
El azufre-34 ahora se puede utilizar como trazador, permitiendo seguir la actividad de este elemento utilizando técnicas de espectrometría de masas.