Los científicos han indicado que debemos reducir a nivel global nuestras emisiones de CO2 para evitar que el calentamiento global transforme el planeta en un lugar inhabitable. Pero algunas empresas, como Volkswagen, dificultan los esfuerzos por combatir el cambio climático al recurrir a prácticas fraudulentas para incrementar sus ganancias y evitar los controles de emisiones de gases contaminantes establecidos por la ley. Algunos modelos de automóviles diésel fabricados por la firma alemana poseen un software especialmente diseñado para manipular los resultados de las pruebas y mostrar niveles de emisiones de CO2 inferiores al real. El engaño fue descubierto, Volkswagen ha perdido millones, pero el planeta sigue perdiendo la batalla contra el calentamiento global.
Se calcula que son 11 millones de automóviles que han sido comercializados con un software fraudulento que detecta cuando el vehículo está pasando una inspección técnica y automáticamente muestra niveles de emisión de óxido de nitrógeno y CO2 muy por debajo de lo real. Se ha comprobado que los automóviles equipados con motores diésel EA189 de cuatro cilindros, emiten contaminantes que superan entre 5 y 35 veces los niveles permitidos en Estados Unidos.
Pérdidas enormes
El lunes por la mañana, tras conocerse el escándalo, Volkswagen perdió en la bolsa 15.600 millones de dólares, y sus acciones se redujeron en más de 30% en los siguientes dos días. Además se estima que la empresa podría enfrentar multas por 18 mil millones de dólares por parte de las autoridades de Estados Unidos. Italia, Alemania, Francia y Corea del Sur han anunciado que iniciarán investigaciones para identificar si en sus mercados se comercializan autos contaminantes.
El escándalo generado por Volkswagen ha afectado a toda la industria, Peugeot y Renault experimentaron una caída el pasado martes en la bolsa de Francia.
Este fraude colabora con el calentamiento global, aportando más de 11 millones de autos contaminantes al mercado. Los compradores de los modelos Jetta, Beetle, Audi A3, Golf y Passat se han visto engañados al creer que compraban un auto amigable con el medio ambiente. La confianza en las empresas de la industria de fabricación de autos no se podrá restaurar fácilmente y se ha puesto en la mira a todas las empresas fabricantes de automóviles.
Los estudiantes de las especialidades y maestrías en medio ambiente de FUNIBER deben mantener una estricta vigilancia sobre las empresas que no respetan las normas establecidas sobre el cuidado del medio ambiente, para evitar el consumo de productos que pudieran aportar a la contaminación del planeta.
Fuentes:
http://fnbr.es/1jt
http://fnbr.es/1js
http://fnbr.es/1jr
http://fnbr.es/1jq
Foto licencia CC:
David Villarreal Fernández