Estudio realizado por la Universidad de Zaragoza mide la actividad física de adultos mayores españoles para validar la versión corta del Cuestionario Internacional de Actividad Física (IPAQ por sus siglas en inglés) en población de 65 años a más
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la actividad física en las personas mayores ayuda a disminuir las tasas de mortalidad, mejora el funcionamiento cardiorespiratorio y muscular, así como fomenta una buena salud funcional y cognitiva. La OMS recomienda 150 minutos de actividad física a los adultos mayores de 65 años a más, para prevenir el riesgo de desarrollar obesidad, diabetes mellitus tipo 2, problemas cardiovasculares, limitaciones funcionales y discapacidad, entre otras patologías.
Es por eso, que en aras de validar el contenido y fiabilidad del IPAQ, se llevó a cabo una investigación, que ha sido publicado en la Revista Española de Salud Pública, y contó con la participación de 139 personas, de los cuales 42 eran hombres y 97 mujeres. Las variables de medición, del mencionado cuestionario, para referirse a movimientos físicos son: caminar, actividades moderadas que se entienden como limpiar baldosas o cristales y actividades vigorosas o intensas como cavar en el huerto. Entre los resultados, se hallaron algunos datos interesantes:
- Los hombres españoles son quienes logran mejores niveles de actividad física
- Las mujeres son quienes más actividades moderadas realizan
- Ninguno de los dos sexos realiza actividades intensas
El desafío
Existen diversos motivos por lo que las mujeres no alcanzan altos niveles de actividad física, por ejemplo, el desarrollo de enfermedades crónicas que afectan la movilidad, como son la osteoporosis o artritis, más frecuente en el sexo femenino con una diferencia estadísticamente significativa entre ambos sexos[i].
A pesar de eso, la OMS plantea que los adultos mayores realicen actividades recreativas o de ocio, desplazamiento (es decir, caminatas o paseos en bicicleta), actividades ocupacionales como atender tareas domésticas o practicar algún deporte.
El objetivo es que alcancen el tiempo recomendado con diferentes tipos de actividades. En sus recomendaciones sobre la práctica de actividades, la OMS incorpora un término interesante “acumulación”. Se trata de sumar los 150 minutos de ejercicios o actividades semanales, con 30 minutos diarios cinco veces a la semana, por ejemplo.
Los adultos mayores que padezcan alguna enfermedad limitante también pueden pasar de la categoría «sin actividad» a la de «cierto nivel» de actividad y comprobar cómo mejora su salud en alguna medida. Los adultos mayores que no siguen las recomendaciones de realización de actividad física deberían intentar aumentar la duración, la frecuencia y, finalmente, la intensidad como meta para cumplirlas.
Los alumnos de la maestría de Gerontología de FUNIBER tienen presente las recomendaciones que la OMS realiza sobre el cuidado y mejora de la calidad de vida de los adultos mayores.
Fuente de información: Medición de la actividad física en personas mayores de 65 años mediante el IPAQ-E: Validez de contenido, fiabilidad y factores asociados
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[i] Crimmins EM, Kim JK, Sole-Auro A. Gender differences in health: results from SHARE,ELSA and HRS. Eur J Pub Health. 2010; 21 (1): 81-91