Los entrenamientos de fuerza benefician a los ancianos para minimizar los efectos de la sarcopenia. Los resultados obtenidos en este estudio demostraron que el entrenamiento puede ayudar a mejorar la fuerza en ancianos, y al mismo tiempo reducir el número de caídas.
El estudio se realizó con la participación de 35 personas, 18 en el grupo de ejercicio y 17 en el grupo de control. En el grupo de ejercicio se analizó la evolución de 4 varones y 14 mujeres, mientras que en el grupo de control a 4 varones y 13 mujeres, con una media de edad de 73 años.
Los participantes del grupo de ejercicio mantuvieron un régimen de entrenamiento de fuerza a velocidad moderada-alta durante 24 semanas.
Se midió la evolución del desarrollo de fuerza, realizando pruebas como el test chair stand, step de 2 min, y 2 saltos verticales, la fuerza explosiva o squat jump (SJ) y la fuerza elástico-explosiva o countermovement jump (CMJ). Adicionalmente, se analizó el número de caídas entre ambos grupos que participaron en el estudio.
Se observó que el grupo que realizó los ejercicios mejoró en toras las pruebas, a excepción del CMJ, mientras que el grupo de control experimentó un deterioro en su desempeño. Al final de la intervención la diferencia resulta significatica entre ambos grupos, en todas las pruebas. Los investigadores señalaron además que existe una relación inversa entre la variable de fuerza chair stand y el número de caídas.
http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0211139X13002370