En entrevista para el sitio web Porvir, el profesor en psicología de la educación y experto Fernando Becker señaló algunos cambios necesarios para el modelo escolar, en el contexto de Brasil.
Según Becker, el modelo que se aplica actualmente básicamente radica en explicar un contenido, hacer que los alumnos copien y repitan muchas veces para que cada uno memorice la materia que se enseña. “Ellas necesitan cambiar esto, las escuelas deben apuntar una didáctica en la cual el alumno ya no esté en la condición de copista y repetidor, sino protagonista”, dice.
Acumular todo el contenido ya no es efectivo debido a la inmensa cantidad de información a la que todos tenemos acceso. Así que, más que enfocar en la acumulación de conocimiento, la escuela debería formar capacidades y competencias cognitivas, estimulando el pensamiento.
“Cuando leemos un texto es necesario que la gente logre capturar la estructura del texto, su totalidad, saber qué propone, cuál su idea central, cuáles son sus puntos secundarios y cuáles son las conclusiones principales y las accesorias que legitiman la principal. Estos son unos ejemplos de capacidades que se deben trabajar en las escuelas”, explica Becker.
Para el profesor, hace falta respetar la experiencia previa de cada alumno y evitar cualquier perjuicio pedagógico a respecto del desarrollo diferencial del estudiante. Se debe enfocar la enseñanza en la estructura cognitiva antes que preocuparse con el contenido.
Una manera de estimular el pensamiento es proponer problemas para resolución, donde lo más importante es plantear preguntas y no precisamente llegar a una respuesta concreta. De acuerdo con el experto, el modelo debería centrarse en la “relación producida por ambos. Es necesario difundir la idea, como defendía Piaget, que al investigar un conjunto de problemas el resultado principal no sea la respuesta, sino la formulación de nuevas preguntas”.
Finalmente, Becker plantea un listado de verbos que deben representar las acciones necesarias para este nuevo modelo de escuela, muchos de ellos basados en las ideas de Piaget y Freire: “cooperar, descentrarse, hallar, comprender, inventar, construir, ultrapasar – al revés de imponer límites –, tomar consciencia, testar, sentir – los sentimientos son tan cognitivos como cualquier otra percepción –, reflejar, probar, interactuar – medular en el pensamiento de Piaget –, intervenir, indagar, transformar, dialogar – la esencia de Paulo Freire –, y finalmente: preguntar. Estos verbos nombran acciones, ricas e variadas, donde su traducción pedagógica o didáctica desplaza los objetivos de la educación escolar para más allá de la copia y de la repetición. Es este el camino hacia la autonomía, fundamento de la verdadera ciudadanía”.
Fuente: http://porvir.org/porpensar/as-escolas-deveriam-ser-oficinas-de-conhecimento/20131022
Foto: Tânia Meinerz / divulgación