En un mundo individualista una aerolínea desarrolla una campaña navideña que invita a colaborar y compartir
Estamos en una sociedad más conectada digitalmente, pero al mismo tiempo los seres humanos se encuentran más desconectados, perdidos en sus propios feudos de información que se extienden en la diminuta pantalla del móvil. En este mundo las personas están cada vez más solas y no hay lugar, más lleno de personas que un aeropuerto, pero al mismo tiempo el lugar en el que más personas están solas. Pero una aerolínea inició una campaña para cambiar esa situación.
La empresa holandesa KLM desarrolló una actividad para conectar con los usuarios de los aeropuertos con una iniciativa de experiential marketing, una herramienta que ha permitido conectar eficientemente con los usuarios del aeropuerto, apelando a la experiencia de la cena de navidad.
Como resultado de la experiencia se ha logrado un video que ya se está haciendo viral en las redes sociales, y es que KLM desarrolló un ambiente singular, con un buffet que requería de un ingrediente especial: la amistad.
La aerolínea dispuso en el medio de una sala de espera de un aeropuerto una mesa con un banquete, pero en una plataforma elevada. Debajo de la plataforma un círculo de asientos esperaba a los viajeros, pero había un truco: si una persona se sentaba en las sillas la plataforma bajaba un poco; era necesario que otras personas se sumen a la experiencia, y pronto todos estaban interactuando con extraños para lograr que participen en el esfuerzo de lograr que la mesa baje hasta el nivel en el que todos puedan comer. Después de algunos instantes los pasajeros lograron la meta, y la marca logró unirlos, en medio de sonrisas y bromas, para lograr un beneficio: la cena de navidad servida.
La campaña ha tenido gran impacto y su reconocimiento sigue creciendo. Los estudiantes del área de Empresas de FUNIBER procuran conectar con el público para lograr mayor aceptación de la marca.
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Fuente: Merca20
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