El nacimiento prematuro está relacionado con el 75% de las muertes de recién nacidos. Una investigación publicada el 4 de marzo en la revista BMJ, revela que una dieta saludable, que incluya abundantes frutas, verduras, granos integrales y agua, permite reducir el riesgo de parto prematuro (antes de las 37 semanas de embarazo). Los investigadores indicaron que varios estudios previos han sugerido que una dieta rica en frutas y verduras puede ayudar a prevenir el nacimiento prematuro.
El estudio se realizó en Noruega, país en el que los investigadores analizaron los datos de más de 66 mil mujeres embarazadas entre los años 2002 y 2008. Del total de casos estudiados, se identificó que poco más del 5% de las pacientes experimentaron un parto prematuro. Los resultados del estudio mostraron que las mujeres que mantenían una dieta saludable tuvieron menor riesgo de parto prematuro, al igual que las mujeres que consumieron una dieta tradicional de Noruega, en la que se incluye papas hervidas, pescado y verduras cocidas.
Los investigadores indicaron que una dieta occidental con alimentos salados, pan blanco, postres, pan blanco y productos cárnicos, al parecer, no tuvo un efecto sobre el parto prematuro. Teniendo en cuenta estos hallazgos, los investigadores señalaron que es más importante incrementar el consumo de comida saludable que abstenerse de comer alimentos malsanos. Teniendo en cuenta los resultados del estudio, Lucilla Poston, de la Universidad de Londres recomendó: «sería bueno aconsejar [a los profesionales de salud] que refuercen el mensaje de que las mujeres embarazadas coman una dieta saludable».
Se encontró una relación entre una dieta saludable y un menor riesgo de parto prematuro, pero no se probó causalidad.
Fuente
http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/news/fullstory_144956.html
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