Los consumidores comienzan a demostrar una mayor preocupación por su propia salud y bienestar y el de sus familias. Esta nueva tendencia ha permitido que los usuario se hagan más exigentes al reclamar a los fabricantes de alimentos detalles muy específicos sobre los ingredientes y nutrientes de los alimentos, para de esa forma informarse y tomar la mejor decisión en cuanto a sus necesidades dietarias. Dos áreas muy marcadas en torno a esta preocupación, están representadas por los niveles de sal y azúcar presentes en los alimentos elaborados.La sal puede aumentar la incidencia de enfermedades cardiovasculares (ECV), y por otro lado, un elevado nivel de azúcar  puede impedir la pérdida de peso e incrementar la incidencia de diabetes en la población. Por estos motivos es prioritario que las marcas informen acerca de la carga de sal y azúcar que se incorpora en los alimentos procesados, para que el usuario tome una decisión bien informado.

Las empresas han tomado nota de la demanda del mercado y hoy ofrecen productos que son “naturalmente bajos en sodio” o que “no contienen azúcar agregado”. El país con mayor cantidad de productos que mantienen esta visión se da en Estados Unidos, por ser el país con mayor número de consumidores, pero se observa también un incremento en la comercialización de este tipo de productos en México, Brasil, Argentina y Chile.

En México, por ejemplo, se comercializan los caramelos duros de chocolate Sorbee Lites, una golosina que resulta baja tanto en sodio como en azúcar, o las barras de cereal multifibras de Corasano, que promueven una mejor salud cardiovascular, con un bajo contenido de sodio.

Productos que tradicionalmente han tenido un alto contenido de sodio, hoy desarrollan nuevas versiones con menor cantidad de sodio, como en el caso de los cubos Knorr en Argentina, o la mostaza Taeq en Brasil.

En Australia y el Reino Unido, comienzan a aparecer productos orientados al mercado infantil, que se promocionan bajo la oferta de “libres de chatarra”, por ejemplo, los snacks Organix Goodies, en el Reino Unido, cuyo fabricante destaca que sus productos se cultivan orgánicamente, no contiene saborizantes agregados, está libre de glutamato monosódico, y tienen un bajo contenido de sal y grasas.

En cuanto a los productos con menor cantidad de azúcar, se ha logrado una gran reducción en mercados como en Estados Unidos, pero en Latinoamérica la cifra es aún pequeña. Se observa sin embargo que aunque los productos industrializados no han desarrollado muchos productos bajos en azúcar, los consumidores han comenzado a comprar edulcorantes naturales como el agave o la stevia para reemplazar el azúcar.

Coca-Cola ha tomado nota de esta tendencia, y se dice que pronto lanzaría productos basados en alguno de estos dos edulcorantes naturales, consiguiendo además ingresar a nuevos mercados, porque un producto en base a stevia o agave podría ser considerado como seguro para los diabéticos. PepsiCo ha lanzado en el Reino Unido Pepsi Raw, una bebida preparada con caña de azúcar y extractos de otras plantas, posicionándose en el mercado con una opción “natural”.