Hasta la fecha no se tenía un estudio que demostrase la efectividad de productos análogos a la insulina en tratamientos de diabetes tipo 1, tipo 2 o gestacional. Un equipo de investigadores se dedicó a identificar las consecuencias del uso de análogos insulínicos de pronta acción como los productos de acción prolongada para distintos tratamientos de diabetes, llegando a la conclusión que los productos análogos no ofrecen mayores beneficios comparados con insulinas convencionales.

Para realizar este estudio se seleccionaron 117 estudios, en los que participaron 4390 pacientes que recibieron receptores análogos de pronta acción y 6940 pacientes que recibieron similares medicamentos de acción prolongada. Se seleccionaron estudios en los que se hizo una comparación entre la administración de productos análogos a la insulina con el suministro de insulina animal o humana a pacientes que seguían tratamientos contra la diabetes tipo 1 y 2, así como mujeres con diabetes gestacional.

Se tomó como medida la evolución en los niveles de hemoglobina glicosilada, la aparición de episodios de hipoglucemia, los niveles de calidad de vida y el grado de satisfacción de los pacientes. Por otro lado, se midió la aparición de complicaciones, los efectos adversos y muerte de los pacientes.

Los productos análogos a la insulina, tanto aquellos de pronta acción como los de acción prolongada, no aportaron mayor beneficio en comparación con las insulinas convencionales. En términos de reducción de la hipoglucemia no se muestran beneficos apreciables. Al analizar el grado de satisfacción de los clientes y su calidad de vida, se encuentran datos contradictorios, debido a que algunos estudios reportan un beneficio significativo, en tanto que otros indican que no se encuentran diferencias en las comparaciones con la insulina regular humana.

Cuando se intentó analizar los datos para identificar las complicaciones a largo plazo y la mortalidad, se encontró que los datos proporcionados eran insuficientes, y por tanto los especialistas consideran que se hace necesario realizar nuevos estudios para llegar a conclusiones  fiables en torno a los efectos adversos.

Si se desea obtener mayores detalles respecto a este tema, se puede consultar con Mr. S.R. Singh, Canadian Agency for Drugs and Technologies in Health, 600-865 Carling Ave., Ottawa ON K1S 5S8, Canada.