La hipohidratación o la pérdida de líquidos en el cuerpo puede afectar al rendimiento durante los ejercicios. Para obtener más información sobre los efectos de la hipohidratación en la fuerza y la potencia máxima muscular, un grupo de investigadores en el Reino Unido han hecho experiencias con nueve atletas masculinos.
En dos contextos diferentes, deberían completar 90 minutos de bicicleta a 40ºC. Algunos en condición de hipohidratación, otros de normohidratación. Ambos fueron evaluados antes y después de cada ejercicio.
La investigación encontró que la producción máxima de las fuerzas isométrica e isocinética disminuyó después del ejercicio y que hubo mayor pérdida de fuerza en la condición de hipohidratación. El mecanismo de contracción periférica también parece sufrir con la deshidratación ya que presentó una tendencia más lenta en la tasa de relajación después de la actividad.
La respuesta a la estimulación del nervio del músculo después del ejercicio en el calor presentó diferencias, dependiendo de la condición. La función neuromuscular depende de factores periféricos, tales como la contracción, la transmisión neuromuscular y la excitabilidad, así como factores centrales, incluyendo el control motor y cambios en la excitabilidad o capacidad de respuesta de las neuronas motoras de la columna vertebral.
El incremento de la excitabilidad muscular periférica evidente en la condición de hipohidratación no fue suficiente para mantener el desempeño en la contractilidad muscular reducida.
Se han utilizados dos tipos de estimulación magnética: la estimulación periférica del nervio femoral (PNMS) y la estimulación transcraneal de la corteza motora (TMS).
Fuente: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24098574
Foto: will ockenden con licencia de Creative Commons
Mié, 13 Nov 2013
