Muchas veces, cuando una empresa necesita realizar mejoras, el primer pensamiento que se le ocurre a los directivos es incrementar recursos, sea invirtiendo en equipos, contratando más personal, comprando materiales o ampliando su infra-estructura.
Según José Roberto Ferro, presidente de Lean Institute Brasil, este modo de pensar es dominante en las organizaciones y plantea cierta “pereza” para buscar maneras nuevas de hacerse las cosas.
Por ejemplo, cambiar procesos y reducir gastos son acciones que pueden generar mejores resultados. Para salir del círculo vicioso de que una mejora solo se logra tras una inversión, es importante aprender a desafiar las situaciones con cuestionamientos sobre nuevas formas de organizar y realizar los trabajos existentes y responder a las demandas.
Una metodología necesaria es saber oír a todos los involucrados que pueden apuntar y sugerir ideas nuevas y mejores, promoviendo la creatividad de las respuestas y la participación de todo el equipo.
La mentalidad de reducir costos es una práctica gerencial que prevé maximizar el valor, a partir de la reducción continua de gastos para convertir la empresa en una organización más eficaz.
Se fomenta la inteligencia y el cambio para optimizar los recursos, contra la práctica del gasto vicioso. En la medida que las empresas logren superar la pereza de pensar y busquen alternativas, los resultados serán mejores para todos; clientes, accionistas e incluso para los propios colaboradores que van a aprender más y podrán utilizar sus capacidades intelectuales más plenamente.
Fuente: http://epocanegocios.globo.com/Inspiracao/Empresa/noticia/2013/12/melhorias-nem-sempre-dependem-de-mais-recursos.html
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