Un estudio reciente revela que el consumo de cerezas podría ayudar a reducir el riesgo de padecer ataques de gota entre un 35 a 75 por ciento. Participaron en este estudio 633 pacientes que habían sufrido ataque de gota en los últimos 12 meses, y durante un año se recopiló información sobre la evolución de la enfermedad en pacientes que consumían cerezas de forma habitual.

De los 633 pacientes 224 manifestaron que consumieron cerezas naturales durante el año, mientras que 15 indicaron que consumían extracto de cereza y 33 ambos productos.

Se recopiló información de 1.247 ataques, casi dos por paciente, y se logró determinar que el consumo de cerezas dos días a la semana estaba asociado con una reducción de padecer un ataque de gota de alrededor de 35 por ciento. Además se identificó que el consumo de extracto de cerezas permitía reducir el riesgo en un 45 por ciento y el consumo combinado de ambos productos hasta un 37 por ciento.

Se identificó además que el mayor beneficio se obtenía al combinar el consumo de cerezas naturales con el medicamento para la gota allopurinol (Lopurin, Zyloprim), logrando con esta combinación una reducción del riesgo de hasta 75 por ciento.

El autor principal del estudio advierte que los resultados no prueban que las cerezas eviten los ataques de gota. «Pueden comer todas las cerezas que deseen, pero sin abandonar el tratamiento médico», dijo Yuqing Zhang, profesor de la Facultad de Medicina de Boston University.