Un nuevo estudio señala que los alimentos orgánicos no son más saludables o nutritivos que aquellos alimentos cultivados de manera convencional. Sin embargo, el mismo estudio asegura que los alimentos orgánicos tienen 30 por ciento menos posibilidades de estar contaminados con pesticidas que las frutas y vegetales que han sido cultivados con métodos convencionales. Además se identificó que el pollo y el cerdo orgánico parecían tener una menor exposición a bacterias resistentes a antibióticos.
Los análisis realizados no muestran diferencias entre el contenido de vitaminas de alimentos orgánicos y los cultivados con métodos tradicionales. Los investigadores obtuvieron los datos a partir de la revisión de 37 estudios previos, incluyendo 17 estudios sobre dietas en los que se realizó una comparación del consumo humano de productos orgánicos frente a los convencionales y 223 estudios en los que se comparaban los niveles de nutrientes o la contaminación bacteriana, fúngica o de pesticidas de productos tales como frutas, verduras, cereales, carnes, lácteos, aves de corral y huevos producidos de manera orgánica y convencional. Se identificó una mayor concentración de fósforo en los alimentos orgánicos, pero no se consideró relevante este hallazgo porque actualmente las personas no tienen deficiencia de esa sustancia en el organismo.
En el cultivo de vegetales orgánicos por lo general no se utilizan fertilizantes sintéticos, pesticidas o aditivos químicos que pudieran contaminar los frutos. En el caso de la crianza de animales no se utilizan hormonas o antibióticos y se permite a los animales moverse libremente al aire libre, alimentándoles con subproductos orgánicos sin pesticidas. Por otro lado, los productos orgánicos tienen un costo que muchas veces duplica el costo de los productos tradicionales, pero los compradores optan por comprar productos orgánicos no solo por cuestiones de salud, la Dra. Crystal Smith-Spangler, profesora en la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford, asegura que los compradores evalúan factores como el sabor, el cuidado del medio ambiente o el cuidado de los animales, que son factores que no han sido tomados en cuenta en este estudio.