Realizando análisis de muestras de sangre y cabello en recién nacidos, investigadores de la División de VIH/Sida del Hospital General y Centro Traumatológico de San Francisco, identificaron que algunos antirretrovirales como el lopinavir y ritonavir se transfiere al feto en el útero, mientras que medicamentos como el efavirenz se transmite a los niños tanto en el útero  como durante la lactancia, con una concentración de 40 por ciento respecto a los niveles encontrados en las madres. Se tomaron muestras de sangre para determinar la exposición a los fármacos en las últimas 24 horas y se estudiaron las concentraciones de antirretrovirales para determinar la exposición en los últimos 30 días.

Monica Gandhi, autora del estudio y médica en la división de VIH/Sida del Hospital General y Centro Traumatológico de San Francisco,  explicó que se tomaron en cuenta muestras de cabello para poder identificar la exposición al fármaco antes del nacimiento, porque el cabello comienza a crecer en el niño cuando está en el vientre de la madre.

La doctora Ghandi indica que medicamentos como el lopinavir se transfieren a los niños en el útero en niveles elevados, mientras que otras medicinas como el Ritonavir lo hacen en menor medida.En el caso de Efavirenz se identificó muestra del fármaco en el pelo, y presencia del 15 por ciento de la dosis registrada en la sangre de las madres, con lo cual se determinó que el Efavirenz se transfiere al niño tanto en el útero como durante la lactancia.

El estudio se realizó analizando  muestras de cabello y sangre de 45 parejas, madres e hijos, a las que se les suministró un régimen antrirretroviral que incluía el inhibidor de la proteasa lopinavir potenciado con ritonavir. A otro grupo de 64 madres se les proporcionó un tratamiento basado en efavirenz. Los niños del grupo tratado con Lopinavir registraban niveles del fármaco equivalentes al 87 por ciento de la cantidad registrada en el cabello de las madres.