¿Cómo probar la efectividad de una nueva droga contra el cáncer sin utilizar animales para estudiar los efectos del químico en un organismo vivo? por el momento el uso de animales es inevitable. La catedrática de Fisiología, María Jesús Tuñón, asegura que utilizar animales es «imprescindible». Existen alternativas, como la simulación en computadoras y utilizar cultivos celulares in vitro, pero a medida que se logran avances en las investigaciones es inevitable llegar al punto en el que se necesita realizar pruebas en animales antes de realizar las pruebas en humanos. Se debe considerar que el 70% de los premios Nobel de Medicina utilizaron animales para sus investigaciones.

Tuñon asegura que en Europa se han establecido mecanismos para reducir el maltrato animal y  para ciertos experimentos se debe demostrar que es indispensable el uso de animales. La investigadora asegura que al utilizar animales es posible estudiar los mecanismos moleculares que conducen a ciertas enfermedades. Las pruebas de medicamentos en animales se utilizan para medir la potencia, el alcance y la toxicidad de los tratamientos, y estas pruebas pueden tomar mucho tiempo «antes de que un medicamento pase fase humana puede pasar al menos diez años».

Los activistas que defienden a los animales tienen dos enfoques frente a los experimentos con animales: un grupo procura que se reconozcan derechos para los animales y se niegan a que se utilice a los animales con fines experimentales y otro grupo trabaja para que los animales se utilicen para experimentos, pero bajo condiciones que garanticen un mínimo de bienestar, sin malos tratos, ni abusos.

Uno de los centros que está a cargo del cuidado de animales es el Animalario de la Universidad de León, un espacio que alberga ratones, ratas, cobayas, conejos, peces y otras especies que son utilizadas para las pruebas de medicamentos. Las investigaciones que se realizan están centradas en este momento en enfermedades como el cáncer, enfermedades del hígado, renales, oculares, cerebrovasculares, así como desórdenes relacionados al comportamiento, metabolismo o nutrición. Aquellos investigadores que requieren utilizar un animal para experimentos deben solicitar un permiso a la comisión de ética de la Universidad de León.

De acuerdo a la reglamentación, el Animalario cuenta con un responsable de salud animal, que es un veterinario especializado en el cuidado de animales de laboratorio, y también trabaja allí un responsable de bienestar animal y dos cuidadores especializados.

En el 2010 se utilizaron más de 1.344.986 animales para experimentos, de este universo unos 480 mil fueron peces, y cada vez se utilizan más peces porque tienen un 80% de similitud con los humanos.