En centros de salud se observó que al culminar en forma exitosa un tratamiento para dejar de fumar, los pacientes enfrentaban en la mayoría de casos un incremento de peso en promedio de 7kg. Esta tendencia negativa llevó a un equipo de científicos a realizar una investigación para identificar la relación entre las intervenciones para dejar de fumar y sus efectos sobre las variaciones del peso corporal. El estudio se dividió en dos partes. En una primera etapa se recopilaron datos de intervenciones diseñadas específicamente para ayudar a dejar el hábito de fumar y al mismo tiempo limitar un posible aumento de peso en el paciente; en la segunda etapa se analizaron los resultados de intervenciones de tipo general que fueron diseñadas para ayudar a dejar el nocivo hábito de fumar, pero que al mismo tiempo pudieran tener un efecto en el incremento de peso de los pacientes.

Se seleccionaron diversos estudios que incluían terapias de reemplazo de nicotina, suministro de antidepresivos, antagonistas de receptores denicotina, antagonistas de receptores de cannabinoides tipo 1 (rimonabant) o intervenciones basadas en ejercicios.En el estudio de la primera etapa se tomaron en cuenta estudios en losque se proporcionaba información sobre el abandono del hábito de fumar y la evolución del peso corporal. Para la segunda etapa, se analizaron estudios en los que hicieron seguimiento de los pacientes y controlaron su peso tras 6 y 12 meses de abstinencia.

Al brindarle a los pacientes asesoría para mantener una dieta equilibrada, se logró una reducción de peso de 1,30Kg, mientras que el grupo de pacientes que fue sometido a intervenciones cognitivo-conductuales lograron contener el incremento de peso y registraron a los 12 meses una reducción de 5,20 kg; por otro lado, las intervenciones en las que se aplicó una rutina de ejercicios no tuvieron un impacto significativo alterminar el tratamiento, pero a los doce meses los pacientes alcanzaban una reducción de 2,07kg.

Intervenciones farmacológicas

Al analizar los datos para determinar la eficacia de los tratamientos confármacos, se identificó que los pacientes tratados con dexfenfluramina subieron de peso poco menos de 2,5Kg, quienes siguieron un tratamiento con fluoxentina perdieron en promedio 0,80 Kg, los pacientes a quienesse administró naltrexona incrementaron su peso en 0,76 kg, y las personas que utilizaron fenilpropanolamina bajaron 0,50kg. Estas cifras resultan alentadoras, pero no se registraron cifras que permitieran controlar los efectos a los 6 ó 12 meses después del tratamiento.

Los pacientes que utilizaron sustitutos de la nicotina lograron una reducción de peso tanto al culminar el tratamiento, con al menos 0,45kg, como a los 12 meses, con reducciones de 0,42kg en promedio. Dosis de 300mg diarios de bupropión tuvieron el efecto de limitar la ganancia de peso al concluir el tratamiento en aproximadamente 0,76 kg en promedio. Además los pacientes tratados confluoxetina, con dosis de entre 30 a 60mg diarios reportaron un menor incremento de peso al finalizar el tratamiento, en promedio conreducciones que bordeaban los 1,30 kg.

No se encontraron datos fehacientes sobre la acción ejercida por medicamentos como el rimonabant o la vareniclina respecto de los incrementos de peso. Sin embargo, al analizar tres ensayos comparativos entre bupropión y vareniclina, los pacientes que utilizaron bupropión culminaron el tratamiento con tasas menores de incremento de peso, en promedio con 0,51 kg menos que los pacientes de control.

Se observó además que en un estudio se prolongó el tratamiento por 12 semanas más en personas que ya habían dejado el hábito, resultando unamedida efectiva para reducir el aumento de peso en al menos 0,71 kg al término de la nueva intervención. Al realizar un seguimiento apacientes que habían utilizado bupropión se identificó que después deun año consiguieron una reducción de peso menor a los 0,38 kg.

Tras analizar los datos obtenidos los investigadores determinaron que lainformación reunida resulta insuficiente para establecer con claridad el tipo de intervenciones que resultarían clínicamente más efectivaspara limitar la ganancia de peso tanto hacia el final del tratamiento,como a los 12 meses de abstinencia. Se determinó que los fármacos bupropión y fluxetina están relacionados con una reducción de peso, en tanto que entre los tratamientos nofarmacológicos pareciera ser efectivo el tratamiento cognitivo-conductual además de las dietas bajas en calorías, mientras que el ejercicio puede ser considerado en tratamientos de largo plazo. El asesoramiento sobre control de peso no resultó efectivo.