Del 20 al 22 de junio de este año se celebrará en Río de Janeiro, Brasil, la Conferencia sobre desarrollo sustentable de las Naciones Unidas (UNCSD). Miles de actores de sectores de gobierno, ONGs, empresas del sector privado, activistas por el medio ambiente y muchos otros grupos se reunirán para compartir sus propuestas para reducir la pobreza, lograr una mayor equidad social y asegurar la protección del medio ambiente en el largo plazo. La conferencia estará enfocada en dos temas: una economía verde en el contexto del desarrollo sostenible que busca erradicar la pobreza y, por otro lado, generar una plataforma institucional para apoyar el desarrollo sostenible. Pero no todos están de acuerdo con los temas, desde Venezuela llegará una delegación para rebatir la propuesta de «economía verde».
Durante las conferencias se discutirán soluciones para siete áreas que requieren atención inmediata: la generación de empleos, energía, ciudades sostenibles, seguridad alimentaria y agricultura sostenible, agua, océanos y preparación para los desastres.
En el ámbito de trabajo se busca minimizar el impacto de la crisis económica y realizar planteamientos que ayuden a insertar en la cadena productiva a más de 190 millones de desempleados en el mundo y el reto que supone ayudar a los más de 500 millones de desempleados que se proyectan para los próximos 10 años. Por otro lado, la industria de la energía representa un gran reto para la economía mundial, porque enfrentaremos un futuro en el que los combustibles fósiles se harán más escasos y se requiere con urgencia incrementar el uso de fuentes renovables de energía.
Tal vez uno de los temas más críticos que deben analizarse en el próximo Rio+20 será el del agua. cada año mueren millones de personas por que no tienen acceso a agua potable. Se estima que para el año 2050 el 25 por ciento de la población mundial vivirá en lugares que no tienen acceso a agua fresca. El océano es también materia de preocupación: baja de la salinidad, el aumento de los niveles de los océanos a nivel global, incremento de la temperatura de las aguas, cambios en las corrientes marinas, estos y muchos problemas más deben ser abordados para encontrar relación entre los cambios en los océanos y el incremento en la intensidad de los desastres naturales como los fenómenos del Niño y la Niña o los huracanes y tornados en Estados Unidos.
El diseño de las ciudades es un punto clave para establecer las bases de un desarrollo sostenible para la humanidad. Es en las ciudades donde se origina la demanda de recursos que cosumimos del planeta, y donde producimos la mayor cantidad de contaminantes que lanzamos a la atmósfera. La comida es otro de los problemas a resolver, considerando que hoy tenemos alrededor de 925 millones de personas padeciendo hambre y se espera un incremento en la población de dos mil millones de habitantes para el años 2050.
Los desastres naturales a nivel global han incrementado su intensidad, cada vez son más frecuentes las noticias relacionadas a terremotos en zonas urbanas, inundaciones, tsunamis y huracanes. El incremento en la intensidad de los desastres naturales afecta sobre todo a los países en vías de desarrollo. El desarrollo de programas de prevención, el control de edificaciones, la ayuda financiera necesaria y otros temas relacionados se deben tratar pronto para minimizar el impacto entre los ciudadanos.
No todos están de acuerdo
Todos estos temas tienen relevancia en este preciso momento, pero funcionarios del gobierno venezolano consideran que las soluciones que se proponen para crear una «economía verde» apuntan a fortalecer un sistema económico que está dañando el ecosistema global. Jesús Manzanilla, director de la Oficina Nacional de Diversidad Biológica del Ministerio del Poder Popular para el Ambiente de Venezuela (Minamb), asegura que el modelo extractivista que no plantea límites en un planeta que, evidentemente, tiene recursos finitos, no puede ser compatible con la sustentabilidad, por eso el especialista señala: «intento de quitarle la fachada verde; que lo único que tiene de verde es que todo es en dólares. Lo demás es una falacia”.
Manzanilla indica que los pueblos indígenas ya habían descubierto las bases que sustentan las reglas del equilibrio con la naturaleza y son «ciclos armónicos, de equilibrio, un proceso de evolución de millones y millones de años”, y desde el punto de vista del especialista el sistema de mercado que hemos establecido no respeta las leyes de la naturaleza y hoy pretendemos cambiar esos ciclos por flujos de capital y servicios medioambientales “Esos servicios que para los seres humanos no tienen una expresión real de valor, el mercado verde pretende colocarle precio para asignarlos en las relaciones de mercadeo internacional; incluso, apartando los compromisos internacionales en materia de ley ambiental”, advirtió.
El especialista venezolano está apoyando la organización del III Congreso Venezolano de Diversidad Biológica que se desarrollará entre el 22 y el 27 de mayo en la Universidad Nacional Experimental de los Llanos Occidentales Ezequiel Zamora (Unellez) y allí se desarrollarán propuestas concretas con miras a «desmontar mitos» en la Cumbre de la Tierra Rio+20. Manzanilla asegura que se presentarán en Rio+20 con propuestas claras y no presentarán una oposición sin bases sólidas.
Fuentes:
http://minci.gob.ve/noticias/1/214226/venezuela_rebatiren_rio.html
http://www.uncsd2012.org/rio20/index.html