El paso de los años imprime su marca en el cuerpo y la capacidad de movimiento de las personas, por estas razones se hace necesario adaptar el diseño de los hogares a las necesidades de los ancianos, para asegurar que realicen sus actividades cotidianas de forma segura y cómoda.
Los ancianos pasan mucho tiempo en sus viviendas, y es necesario pensar en el diseño de la casa para ayudarles a realizar tareas del día a día. Algunas actividades como entrar y salir de la ducha podrían transformarse en todo un reto con el paso de los años.
Adaptar la estructura interior de la casa permite evitar accidentes, ayudar en la realización de actividades y reducir la necesidad de ayuda por parte de los ancianos, brindándoles un mayor nivel de autonomía.
La modificación de una casa debe tener en cuenta dos aspectos básicos: las propias condiciones físicas y arquitectónicas de la vivienda y la capacidad funcional de las personas que habitan el lugar.
Los especialistas recomiendan tener especial cuidado con algunas áreas como: el acceso a la vivienda, el cuarto de baño, la cocina, la zona de estar, los dormitorios y las zonas de tránsito. Se trata de poner especial cuidado en cada una de esas zonas para simplificar la vida de los ancianos.