Las empresas necesitan encontrar la receta ideal para mantener la motivación de los directivos y empleados en el desarrollo de las labores diarias. Desde luego el dinero es un factor importante, pero no el único para motivar a los empleados. Daniel H. Pink indica que se puede mantener e incrementar la motivación de los colaboradores prestando atención a cuatro factores: el salario, la visión, la autonomía y la maestría.
Pink indica que, de acuerdo a un estudio realizado por especialistas de la Universidad de Chicago, el Carnegie Mellon y el MIT, un mayor salario mantiene la motivación de las personas solo mientras se hacen tareas manuales repetitivas, pero cuando se implican actividades cognitivas el desempeño se reduce al incrementar la cantidad de salario. El experimento se replicó en distintas partes del mundo con resultados similares, por tanto se debe considerar que el salario no es el factor más importante para los empleados que ejecutan actividades que implican cierto grado de conocimiento.
El especialista indica que es más importante conducir a las personas a desarrollar sus talentos y crear productos o servicios de acuerdo a sus habilidades, pues descubrieron que las personas con mayor capacidad suelen realizar actividades o crear productos de forma gratuita por el puro placer de desafiar sus habilidades. Esto indica que los departamentos de recursos humanos tienen una gran tarea por delante para dirigir los talentos, establecer retos y aprovechar toda la capacidad que tienen al interior de la organización al mismo tiempo que logran retener y motivar a los empleados.
De acuerdo a Pink, se debe cuidar que el salario que recibe una persona sea similar al que ganan sus compañeros y conocidos para evitar la desmotivación, pero centrarse sobre todo en potenciar las capacidades y habilidades del trabajador. Adicionalmente la empresa debe construir una visión que motive a los empleados a ir hacia adelante, se debe gestionar utilizando una estructura que promueva y respete la autonomía de las personas al momento de tomar una decisión, y por último procurar desarrollar la maestría de los empleados en aquella labor que realicen, ayudándoles a mejorar sus capacidades para dicho trabajo.
Pink considera que estos son los cuatro aspectos clave que toda empresa debería cuidar para lograr mantener motivados a sus empleados y lograr óptimos niveles de productividad. Desde luego hay otros factores que deben ser atendidos para sostener la motivación de los empleados como el de crear un buen ambiente de trabajo, mantener un liderazgo coherente y proporcionar los recursos necesarios para realizar las labores diarias, entre muchos otros.