Para la construcción del nuevo aeropuerto de Ciudad de México, el gobierno mexicano lanzó un concurso de propuestas arquitectónicas. El proyecto ganador, una sociedad de Norman Foster y el arquitecto mexicano Fernando Romero será la mayor obra de infraestructura de los últimos años en el país, contará con seis carriles y se espera permitir aproximadamente 120 millones de pasajeros anuales.
El concurso mostró proyectos innovadores para la tipología de los aeropuertos, algunos con características mexicanas, como por ejemplo el proyecto de la sociedad entre el mexicano Bernardo Gómez-Pimienta y el norte americano Gensler.
La pareja presentó una propuesta de un edificio eficiente y sustentable, que adapta su espacio para el comercio y las concesiones necesarias y resuelve la complexidad de los desafíos del terreno.
El techo indica las intenciones arquitectónicas durante el proyecto del pasajero. En la terminal, el techo “flota”, en la zona de embarques el techo “cubre” y en la llegada se tiene el techo “diamante”. Los techos están apoyados en columnas ramificadas que desafían la ingeniaría.
La propuesta fue desarrollada por los arquitectos bgp arquitectura + Gensler, Bernardo Gómez-Pimienta, Luiz Enrique Mendoza, Keith Thompson y Terence Young.
Fuente: http://fnbr.es/ua