Por Santiago Brie
Licenciado en Gestión Ambiental Urbana de la Universidad de Lanús – Máster en Diseño, Gestión y Dirección de Proyectos por la Universidad de León. Miembro del Departamento de Profesores de FUNIBER. Tutor del Área de Proyectos especializados en Arquitectura y Urbanismo. Profesor e investigador de la Universidad Nacional de Lanús, Argentina.
La propuesta de Carlos Matus radica en planificar sobre una realidad construida por todos, y no aquella interpretada solo por quienes planifican. La diferencia de trabajar con los problemas de las personas, no con los de los partidos políticos.
Algunas frases que sintetizan su pensamiento:
– “Ningún gobierno puede ser mejor que su identificación y selección de problemas”.
– “Ninguna gestión de gobierno puede ser mejor que la calidad del análisis estratégico que realice”.
Matus se graduó como ingeniero comercial en la Universidad de Chile y obtuvo un MPA en la Harvard University, especializado en Alta Dirección y Planificación Estratégica. Fue nombrado Ministro de Economía de Chile y Presidente del Consejo de la Corporación de Fomento y Producción (CORFO). En 1973 actuó como asesor económico del Presidente de la República y como Presidente del Banco Central de Chile. Desarrolló una intensa labor de docencia en Planificación, para difundir el Método PES (Planificación Estratégica Situacional); dictando cursos a profesionales de Brasil, Venezuela, Ecuador, Colombia, Argentina, Chile, y otros países.
Siendo un experto en planificación, Matus hace una diferenciación sobre:
– la planificación tradicional: rígida y estructural, con pocas posibilidades de adaptación a los cambios, y que representa generalmente la visión de los autores del plan;
– de la planificación situacional: que se revisa y se redefine constantemente, que cambia y se modifica a partir de los cambios que suceden en el entorno; y que considera las diferentes miradas de la realidad, contemplando la participación ciudadana como elemento fundamental para la planificación.
Es decir, Matus propone pasar de una Planificación Tradicional tecnocrática, conductista, rígida, centrada en el planificador, donde los problemas son técnicos y el plan un producto, a una Planificación Estratégica con visión política-técnica-social, participativa, flexible, centrada en los decisores, donde los problemas son de personas y la planificación es un proceso.
Entre sus frases memorables, las siguientes representan su concepción de la planificación:
“Si planificar es sinónimo de conducir conscientemente, entonces no existe alternativa a la planificación. O planificamos o somos esclavos de la circunstancia. Negar la planificación es negar la posibilidad de elegir el futuro.”
“Gobierna quien planifica y planifica quien gobierna”. “Quien no planifica es gobernado por la contingencia, por otros actores que planifican y tienen voluntades ciertas e intereses ciertos sobre la realidad”.