El grafeno es un material muy útil para la industria electrónica, permite construir procesadores mucho más potentes que el silicio. Años atrás el grafeno era un material muy costoso, pero ahora los científicos han logrado obtener este material de forma económica. Las primeras aplicaciones de este material llegan desde el Institut de Ciències Fotòniques (ICFO), donde los investigadores Frank Koppens y Gerasimos Konstantatos han logrado desarrollar un sensor electrónico flexible y ultrasensible a la luz, que permitiría fabricar cámaras con capacidad para tomar fotos y grabar videos incluso en situaciones de ausencia total de luz. También podría crearse parabrisas que aumenten la visibilidad de la carretera y muchos otros usos.

El grafeno es el material más delgado y resistente que se ha descubierto hasta el momento, siendo además un material conductor de electricidad. Este material tiene múltiples usos en el mundo de la electrónica, y gracias al trabajo de Koppens y Konstantatos se aplicará a electrónica de consumo para incrementar la potencia de dispositivos ópticos como las cámaras y algunos dispositivos médicos.

Konstantatos ha logrado situar una capa cristalina de puntos cuánticos sobre la hoja de grafeno, logrando con esto incrementar la sensibilidad del grafeno a la luz por mil millones. Koppens destaca que gracias a este descubrimiento el grafeno automáticamente ha ganado un potencial comercial enorme.

Silvia Carrasco, directora de transferencia comercial del instituto ICFO indica que el invento ya ha sido patentado y tal vez se trabaje en el desarrollo de productos en sociedad con alguna empresa de telefonía o alguna corporación relacionada a la industria de imágenes médicas.