Un grupo de investigadores realizó un análisis de ensayos en los que se realizó una evaluación de los efectos de la deficiencia de nutrientes como selenio, zinc, vitaminas A, C, D y E, así como el consumo de frutas y verduras,  para determinar cuál es la influencia de la alimentación y suplementación en la prevención de enfermedades alérgicas y asma en niños. Los resultados obtenidos revelan los beneficios de la dieta mediterránea y la ingesta regular de ciertas vitaminas.

Para obtener los datos de este estudio se analizaron datos de ensayos recopilados en las bases de datos MEDLINE, EMBASE, Global Health, AMED, CAB, Cochrane Library, LILACS, TRIP, CINAHL, Isi Web of Science y BIOSIS, desde enero de 1988 hasta mayo de 2009. Se realizó un análisis casos de niños menores a 16 años.

Sobre la base del análisis de 62 estudios, se encontró una asociación entre el bajo nivel  plasmático de vitamina A y el desarrollo de asma, en comparación con pacientes no asmáticos. Además se identificó que las dietas maternas ricas en vitaminas D y E durante el embarazo tuvieron efectos protectores que permitieron prevenir el desarrollo de sibilancias en el niño. Además se identificó que el consumo de la dieta mediterránea disminuyó las incidencias de sibilancias persistentes.

El consumo de frutas y verduras arrojó datos que hasta cierto punto resultaron contradictorios. No hubo asociación entre las dietas ricas en vitamina C o selenio y la reducción de incidencia de asma. Adicionalmente, se identificó una relación entre bajos niveles plasmáticos de zinc y el desarrollo de sibilancias pero no se pudo verificar esta relación debido a la heterogeneidad de los datos encontrados.

Gracias a los estudios realizados por el grupo de alergias e investigación respiratoria de la Universidad de Edinburg, se identificó claramente que la ingesta regular de vitaminas A, D y E, así como la dieta mediterránea podría favorecer la prevención del asma, aunque los especialistas indican que sería necesario realizar estudios a gran escala para evaluar estas asociaciones en forma adecuada.

Un grupo de investigadores realizó un análisis de ensayos en los que se realizó una evaluación de los efectos de la deficiencia de nutrientes como selenio, zinc, vitaminas A, C, D y E, así como el consumo de frutas y verduras,  para determinar cuál es la influencia de la alimentación y suplementación en la prevención de enfermedades alérgicas y asma en niños. Los resultados obtenidos revelan los beneficios de la dieta mediterránea y la ingesta regular de ciertas vitaminas.

Para obtener los datos de este estudio se analizaron datos de ensayos recopilados en las bases de datos MEDLINE, EMBASE, Global Health, AMED, CAB, Cochrane Library, LILACS, TRIP, CINAHL, Isi Web of Science y BIOSIS, desde enero de 1988 hasta mayo de 2009. Se realizó un análisis casos de niños menores a 16 años.

Sobre la base del análisis de 62 estudios, se encontró una asociación entre el bajo nivel  plasmático de vitamina A y el desarrollo de asma, en comparación con pacientes no asmáticos. Además se identificó que las dietas maternas ricas en vitaminas D y E durante el embarazo tuvieron efectos protectores que permitieron prevenir el desarrollo de sibilancias en el niño. Además se identificó que el consumo de la dieta mediterránea disminuyó las incidencias de sibilancias persistentes.

El consumo de frutas y verduras arrojó datos que hasta cierto punto resultaron contradictorios. No hubo asociación entre las dietas ricas en vitamina C o selenio y la reducción de incidencia de asma. Adicionalmente, se identificó una relación entre bajos niveles plasmáticos de zinc y el desarrollo de sibilancias pero no se pudo verificar esta relación debido a la heterogeneidad de los datos encontrados.

Gracias a los estudios realizados por el grupo de alergias e investigación respiratoria de la Universidad de Edinburg, se identificó claramente que la ingesta regular de vitaminas A, D y E, así como la dieta mediterránea podría favorecer la prevención del asma, aunque los especialistas indican que sería necesario realizar estudios a gran escala para evaluar estas asociaciones en forma adecuada.