http://www.flickr.com/photos/ngmmemuda/4333067417/sizes/m/in/photostream/Teniendo en cuenta la tendencia creciente en la prevalencia de diabetes mellitus tipo 2 (DBT2) y obesidad infantil, se hace necesario estudiar la influencia que podrían tener estos dos factores en la aparición de enfermedades cardiovasculares en la adultez. Se debe tener en cuenta que la resistencia a la insulina (RI) y la obesidad constituyen componentes importantes del síndrome metabólico (obesidad, hipertensión arterial, dislipidemia e hiperglucemia), los cuales son reconocidos como factores de riesgo para que se presente la DBT2 y enfermedad cardiovascular.

El sobrepeso es el factor predictivo más importante de DBT2, pero la obesidad en sí misma no está asociada a la aparición de la resistencia a la insulina (RI) dado que los estudios indican que no hay relación directa entre el sobrepeso y la RI, además cabe considerar que hay pacientes no obesos, sin diabetes, que pueden padecer de RI.

Se seleccionaron a más de 12 mil estudiantes de escuelas públicas de Minneapolis. La mediana del IMC fue de 21.97 kg/m2 para los varones y de 22.54 kg/m2 para las mujeres. La edad y el estadio de Tanner resultaron similares en los adolescentes delgados y en aquellos obesos.

Los investigadores identificaron que la resistencia a la insulina, en especial cuando está asociada a casos de obesidad  tiene una influencia significativa en la aparición de factores de riesgo cardiovascular relacionados con el síndrome metabólico en la adolescencia. El nivel de riesgo en adolescentes con obesidad y RI, fue mayor que en aquellos que presentaban obesidad y sensibilidad a la insulina, y las concentraciones de insulinemia, triglicéridos y PAS fueron más altas en los participantes obesos.

La interacción entre obesidad y la RI tienen una influencia significativa sobre la aparición de factores de riesgo cardiovascular durante la adolescencia y se sugiere que de ser necesario se realicen “intervenciones dirigidas al tratamiento de la RI además de las centradas en la pérdida de peso, a fin de impedir la aparición temprana de riesgo cardiovascular”.