Un estudio del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Atlanta identificó que desarrollar un control glucémico agresivo puede incrementar el nivel de riesgo de los pacientes. Sin embargo, otro estudio demostró que un control glucémico moderado y personalizado puede incrementar las posibilidades de sobrevivencia de los pacientes.
El estudio desarrollado por la entidad de salud de Atlanta tuvo como objetivo aplicar un control glucémico intensivo, aplicando medicación y cuidados para alcanzar valores de HbA1c inferiores al 6,0% en el primer grupo de estudio y valores entre 7,0% y 7,9% en un segundo grupo de análisis. Se estudiaron a más de 10 mil individuos y se tomaron en cuenta los infartos de miocardio no fatales o los accidentes cerebrovasculares, así como los casos de muerte por causa cardiovascular.
Tras hacer seguimiento a pacientes en tratamiento por doce meses, se identificó que era posible alcanzar una media estable de 6,4% en los niveles de HbA1 contra 7,5% del grupo de control habitual. Se realizó un seguimiento por 3,4 años, pero se suspendieron las pruebas, porque se identificó una elevada tasa de mortalidad en el grupo sujeto a un tratamiento intensivo. Se registraron 257 muertes en el grupo sometido a una intervensión intensiva y 203 muertes en el grupo de control, además se registró que, entre los pacientes bajo tratamiento intensivo, hubo mayor frecuencia de episodios de hipoglucemia que requerían atención médica, y además se registró un aumento de más de 10 kilos de peso entre los pacientes.
El estudio concluye que entre pacientes mayores de 40 años con diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares la aplicación de tratamientos para lograr una intensiva reducción y control de los valores de glucemia, puede tener efectos adversos e incrementar el riesgo de muerte.
La diabetes es una enfermedad que tiene una prevalencia elevada, sólo en Estados Unidos afecta alrededor de 24 millones de personas. El Centro para el Control de Enfermedades – en Estados Unidos- ha demostrado que existe un incremento acelerado de la diabetes desde la década del 80 al año 2006 en un 132 por ciento.
Se conoce que las personas que padecen de diabetes tienen doble riesgo de muerte en comparación con personas que no la tienen,ya que generalmente la diabetes está asociada con enfermedades cardiovasculares.
Experiencias alentadoras
Se sabe que los pacientes diabéticos tienen probabilidades mayores de presentar deficiencias cardiovasculares; el aumento de la glucemia se relaciona con el riesgo cardiovascular y la mortalidad. Sin embargo, hoy en día hay evidencias que el control de la glucemia en niveles normales atrasa el inicio de complicaciones microvasculares en pacientes con diabetes de tipo 1 y 2.
Existen diferentes estudios acerca de la llamada «hipótesis glucémica», muchos de los cuales son contradictorios sobre el valor de reducir los niveles de glucemia en los pacientes diabéticos para contrarrestar ataques cardíacos y enfermedades coronarias. Algunos de los informes se basan en que los niveles menores de glucemia son perjudiciales.
Sin embargo, un estudio realizado en la Clínica de la Universidad de Cambrigde, Inglaterra –el más grande realizado hasta ahora y publicado en la revista The Lancet- ha demostrado que los diabéticos que controlan de manera estricta la glucemia reducen significativamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
El doctor Kausik Ray, investigador principal del estudio, indica que “se ha demostrado que si se reduce la glucemia según lo indican los niveles de HbA1c en 0.9 por ciento en el transcurso de cinco años, se reducen los ataques cardiacos fatales en 17 por ciento y los no fatales en 15 por ciento”. El médico ha señalado que los diabéticos mueren siete años antes que una persona promedio, y tienen la necesidad de varias intervenciones como reducir la presión arterial y el colesterol para mitigar el riesgo de muerte. «A pesar de esto, el riesgo sigue siendo alto, así que un mejor control de la glucemia reduce aún más el riesgo residual», aseguró Ray.