China se ha transformado en el ejemplo mundial de lo que puede suceder cuando se busca el desarrollo económico sin considerar el impacto en el medio ambiente. A principios del 2013 una nube de smog cubrió las principales ciudades en ese país, incluso se prohibió a las personas salir a las calles por considerarse que el ambiente se había tornado muy tóxico. Ahora los medios de comunicación prestan atención a la contaminación y se descubre que los ríos y el agua potable de China también están contaminados. De acuerdo a un reporte publicado por el gobierno chino, se indica que el 40% de los ríos de China está «seriamente contaminado», y el 20% está tan contaminado que se considera peligroso entrar en contacto con el agua. En China el crecimiento industrial ha sido explosivo, por ejemplo, en la década de los 50 Pekín no tenía actividad industrial, pero rápidamente se instalaron en esa ciudad más de 700 fábricas y se levantaron más de 2 mil chimeneas humeantes.
China tiene una población que supera los mil millones de habitantes y consume más de 600 mil millones de metros cúbicos de agua al año, el equivalente a tres cuartos del total de recursos de agua disponibles, indicó Hu Siyi, vice ministro de recursos hídricos. Pero el agua que se consume en China resulta tóxica para sus habitantes. De acuerdo a un reporte oficial, se reportan anualmente 1,700 accidentes que contaminan fuentes de agua en ese país, y esta polución se traduce en aproximadamente 60 mil muertes prematuras por consumo de agua contaminada. Esto se suma a los cerca de 750 mil ciudadanos chinos que mueren por enfermedades respiratorias relacionadas a la contaminación.
El tratamiento de las aguas tanto a nivel urbano como industrial es deficiente. De acuerdo a un reporte de la revista Enviromental Health Perspectives, hacia 1996 solo el 5% del agua municipal, y el 17% del agua desechada por la industria recibía algún tipo de tratamiento antes de ser descargada en lagos o ríos.
El control de los desechos líquidos en los ríos se torna incluso más difícil, considerando que el gobierno no tiene suficiente personal para realizar un estricto control de las fábricas. De acuerdo a un reporte de The Diplomat, solo el 40% de todas las plantas de tratamiento de agua localizadas en las 35 ciudades más grandes de China, tienen la capacidad de realizar pruebas para evaluar todos los 106 indicadores recomendados. Se debe considerar además que hay muy pocos centros de evaluación de la calidad del agua, y los estudios los realiza la misma planta de tratamiento que debería ser evaluada. A todo esto se suma la falta de transparencia del gobierno para presentar las evaluaciones.
El gobierno ha informado que invertirá casi 635 mil millones de dólares en proyectos para la conservación de agua hasta el 2015. Por el momento se ha lanzado una guía para regular el uso de agua bajo un criterio «muy estricto» limitando el uso de agua a un máximo de 700 mil millones de metros cúbicos hasta finales del 2030.
Fuentes:
Contaminación del agua
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC1566519/pdf/envhper00509-0043.pdf
Contaminación del aire y el agua en China
http://www.frontiersinecology.org/specialissue/ESA_Sept06_ONLINE-04.pdf
Video:
Reportaje ríos en China: